En la fecha 9 del Campeonato Uruguayo de la Segunda División, el villero se hizo de tres puntos fundamentales. Ahora suma dos triunfos, cuatro empates y tres derrotas. Rampla hasta ahora ganó uno, empató tres y perdió cinco.

Más allá de lo que pase en la cancha, hay partidos que en la previa se suponen tranquilos y otros que vibran por sí solos: los clásicos. El sol acompañó durante todo el mediodía del sábado, que tuvo un encuentro histórico en el fútbol uruguayo: los equipos de la villa, que desde 1944 no se medían en la B.

La primera vez que se cruzaron fue en 1927, cuando jugaron en el Parque Santa Rosa; desde entonces suelen encontrarse en el barrio que los une. Esta vez, se cruzaron a muchos kilómetros de su entorno.

Walter Pandiani, en su debut como entrenador de Cerro, en el estadio Charrúa.

Walter Pandiani, en su debut como entrenador de Cerro, en el estadio Charrúa.

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El cotejo no tuvo público, aunque este último detalle es relativo; los dirigentes y allegados que tuvieron el privilegio de estar presentes se encargaron de que esto ni se notara.

El juego

La contienda comenzó con un juego rápido pero entreverado, se disputaba en la mitad de la cancha, no había llegadas de ninguno de los dos equipos.

Cerro tenía un poco más la pelota y lo supo aprovechar: a los 15’ Alfonso abrió el marcador, en su primer gol con la albiceleste. Llegó desde lejos y ejecutó un bombazo fulminante al ángulo superior izquierdo, dejando sin chance alguna al arquero Laforia.

Enseguida apareció Rampla en el área, Pablo Pereira probó con un centro bien pegado al arco pero nadie lo tomó y se perdieron el empate.

Pablo Pererira, de Rampla Juniors, y Matías Alfonso, de Cerro, en el estadio Charrúa.

Pablo Pererira, de Rampla Juniors, y Matías Alfonso, de Cerro, en el estadio Charrúa.

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A los 19’ los de Pandiani tuvieron su segunda chance clara: Elizari ejecutó un potente remate desde lejos, el balón pasó muy cerca del arco.

Con el afán del rojiverde por empatar y las intenciones de convertir el segundo, la disputa se tornó más interesante y dinámica. A los 35’ el colombiano Berríos estuvo cerca de empatar con una prolija chilena.

Ir y volver

El complemento fue parejo y se jugó con mucha intensidad. La tenencia de la pelota era compartida.

A los 63’ probó Rampla en dos tiempos, pero los de Benia no eran precisos a la hora de definir.

Dos minutos después llegó Chopitea con remate de media distancia que tapó bien Laforia. En esa sintonía siguió el partido: con posibilidades de convertir para ambos equipos.

También estuvo plagado de faltas; a la media hora del segundo tiempo debió abandonar la cancha Joaquín Machado en el rojiverde con un corte en el rostro y a los 79’, Nicolás Raguso en los villeros, también lesionado.

Los cambios en ambos conjuntos potenciaron lo vertiginoso del asunto. Los últimos minutos del partido tuvieron toda la adrenalina que se espera de un clásico; el que tenía la pelota llegaba e intentaba. A los 82’ probó el gato Tancredi, tapó bien Laforia y a los 84’, Jorge Trinidad, la pelota quedó en las manos del golero.

Cerro fue efectivo en sus jugadas de mayor peligro y por eso el resultado es justo. Hoy el Cerro de Montevideo se pinta de celeste y blanco.

Detalles

Estadio: Estadio Charrúa

Árbitros: José Burgos, Mathías Muníz, Héctor Bergalo.

Rampla (0): Fernando Laforia, Claudio Sevetti, Charles Zoryez, Joaquín Machado (63’ Rodrigo Vidal), Germán Gabriel, Adrián Vila (84’ Facundo Bravo), Isaac Méndez, Gastón Díaz (59’ Horacio Sequeira), Juan Ángel Albín (84’ Enzo Facchín), Joshuan Berríos, Pablo Pereira (84’ Jorge Trinidad). Entrenador: Javier Benia.

Cerro(1): Darío Denis Martín González (45’ Emiliano Álvarez), Pablo Lacoste, Nicolas Raguso (79’ Ignacio Velazquez), Roberto Brum, Agustín Chopitea, Matías Alfonso (68’ Pablo Porcile), Fernando Elizari, Antonhy Sosa (68’ José Luis Tancredi), Brian Cordara (61’ Dylan Nandin), Diego Cohelo. Entrenador: Walter Pandiani.

Goles: 15’ Matías Alfonso (C)