El anuncio de que el gobierno de Estados Unidos retirará sus tropas de Afganistán antes del 11 de setiembre fue criticado por quienes consideran que en el país asiático aún no se ha logrado una estabilidad que impida el regreso de los talibanes al poder. Pero desde la Casa Blanca explicaron que la decisión “no tiene marcha atrás”, ya que “no nos acordamos contra quién estamos combatiendo”. Una fuente del gobierno contó que el presidente Joe Biden tomó la decisión de retirar las tropas “luego de que les preguntó a varios de sus asesores en política internacional contra quién estaba peleando el país y nadie supo responderle”. “Esta situación no se da por problemas de memoria del señor presidente. El resto tampoco nos acordamos”.

Estados Unidos intervino militarmente en Afganistán para sacar a los talibanes del poder en 2001, luego del atentado a las Torres Gemelas, aunque anteriormente había enviado tropas al país asiático para apoyar a los islamistas en su enfrentamiento con la Unión Soviética, entre 1978 y 1992. “La guerra lleva ya 20 años, durante los cuales pasaron muchas cosas tanto en Estados Unidos como en el mundo, y la verdad es que últimamente no le estamos prestando demasiada atención. Entre eso y que primero ayudamos a los talibanes y después los combatimos, terminamos olvidándonos de qué estábamos haciendo ahí. Seguramente ahora nos concentremos en atacar a los iraníes, porque creo que de ellos nunca fuimos aliados. De todas maneras lo vamos a chequear antes de atacar”.