El candidato nacionalista propuso que aquellos estudiantes de los dos quintiles más bajos de la población reciban 80.000 pesos cuando terminen el penúltimo año de secundaria y 160.000 cuando finalicen el último. La propuesta no tuvo demasiadas repercusiones en el sistema político, pero sí sacudió fuertemente el competitivo mercado de los reality shows televisivos. Según pudo saberse, varios productores nacionales e internacionales se mostraron “encantados” con la idea. “Es genial. Son varios participantes en un contexto extremo, como es un liceo de un contexto crítico, peleando por un premio para quienes sobrevivan. Tiene todos los ingredientes para un reality show exitoso. Drama, suspenso, historias de superación personal y ese toque sádico que se obtiene al poner a personas a pelear a muerte por objetivos que a lo mejor no pueden conseguir simple y sencillamente porque el destino no los favoreció”, opinó un experto en este tipo de programas.
La conclusión: “Yo antes sufría porque mi situación me impide terminar el liceo y acceder a los beneficios que eso acarrea. Ahora además sufro porque no voy a tener los 240.000 pesos”. Adolescente que ni va a terminar el liceo ni va a ganar plata porque nació sin plata.