La fiscalía especializada en Crímenes de Lesa Humanidad analizará las actas del Tribunal de Honor realizado a Gilberto Vázquez, en las que admitió haber asesinado y torturado, así como su participación en la desaparición del militante del Partido por la Victoria del Pueblo Adalberto Soba y los vuelos que trasladaron a detenidos desaparecidos uruguayos en Argentina. Además, dijo que en 1989 una junta de generales le encomendó que “preparara el homicidio” de Hugo Cores, Eleuterio Fernández Huidobro y León Lev, con la finalidad de detener un supuesto atentado contra las Fuerzas Armadas (FFAA) y que en 2006 autoridades militares le dijeron que no estaría más de ocho años preso.
El fiscal Ricardo Perciballe dijo a la diaria que ya tiene en su poder las actas y que en las próximas horas analizará su contenido. Las declaraciones de Vázquez y los antecedentes vinculados al Tribunal de Honor que se le dispuso para explicar su intento de fuga del Hospital Militar fueron llevados por el director general de Secretaría del Ministerio de Defensa, Fabián Martínez, al fiscal de Corte, Jorge Díaz, y este lo remitió a la fiscalía especializada. En total son 31 documentos fechados entre el 4 de julio y el 7 de setiembre de 2006.
El ministro de Defensa, Javier García informó en su cuenta de Twitter que se contactó con Díaz para expresarle su disposición para ampliar la información que se requiera que pueda estar en manos del Ministerio. También publicó el acta de entrega, en la que detalla que el tribunal suspendió su actuación al constatar la existencia de presuntos delitos, y que el entonces comandante en jefe (Carlos Díaz) resolvió la continuidad de los procedimientos.
La causa que investigó la desaparición de Adalberto Soba fue la primera por la que fueron procesados militares por crímenes de la dictadura, en setiembre de 2006. Uno de ellos, el coronel retirado Rodríguez Buratti, que se negó a ser conducido por la Policía y se suicidó. A partir de la investigación de Soba se agregaron otros casos de uruguayos detenidos desaparecidos en Argentina. En la causa, se investigaron los hechos sucedidos en Argentina, porque estaba vigente la Ley de Caducidad, que impedía que se pidieran procesamientos por los delitos cometidos en Uruguay. Gilberto Vázquez fue procesado en calidad de coautor de 28 homicidios. La sentencia de primera instancia fue confirmada por el Tribunal y la Suprema Corte de Justicia.
La fiscal Mirta Guianze, que llevó adelante la causa junto al juez Luis Charles dijo a la diaria que, en el juzgado, Vázquez había admitido que participó en los interrogatorios y que para deshacerse de los cuerpos “los quemaban en un tanque de 200 litros”.
Guianze dijo que el atribuirse participación en muertes es una táctica de Vázquez “por su manera de ser”, y que llegó a mostrarse como un organizador del Plan Cóndor al punto que el Tribunal de Apelaciones le computó como atenuante la confesión. La abogada advirtió que las supuestas confesiones de Vázquez tienen un componente “fabulador”, sin sustento probatorio y muchas veces referían a generalidades.
En esa línea llamó a “tomar con pinzas” las declaraciones referidas a los seguimientos a Hugo Cores, León Lev y Fernández Huidobro en 1989 y subrayó que el militar busca presentarse ante el Tribunal como una persona “que había hecho cosas importantes”.
En cuanto a la información que dio Vázquez en el Tribunal de Honor, que buscaba expresamente conocer en qué medida se había afectado el honor de las FFAA por el episodio de la fuga, Guianze dijo que “no hay ningún hecho nuevo para imputarle”, pero advirtió que a diferencia de lo que dijo en el juzgado, en el Tribunal se muestra como autor directo de los hechos, mientras que en el juzgado “él organizaba, siempre eran otros los que torturaban y mataban”.
Guianze dijo que la información sobre los delitos no se entregó al ministro: “Era un momento bien grave para ellos y no iban a mostrar lo que dijo Vázquez, toda esa información no figuraba en el informe, no se entregó”.
Para Guianze la situación generada a partir del hallazgo de las actas es “completamente extraña”, dado que el informe del Tribunal de honor que le dieron en su momento no contenía esas declaraciones. “Supimos todo lo que se decidió con relación a la fuga, de los demás no dijeron nada en ese informe”.
Guianze criticó que la atención se centre en la supuesta falta del presidente Vázquez y el ministro de Defensa, José Bayardi, en dar cuenta del contenido de las actas a la Justicia. “Estoy segura de que Bayardi no ocultó nada porque estuvo siempre a disposición de la Justicia, también Azucena [Berruti]. Había una persona que hacía de intermediario entre el ministerio y la fiscalía para proporcionarnos lo que necesitáramos. Creo que ni el ministro, ni el presidente tenían idea de que eso estaba en el expediente”, agregó.