El jugador de fútbol Nicolás Schiappacasse fue detenido por llevar un arma de fuego con municiones a fines de enero. Lo encontraron en un control policial ubicado a la altura del peaje Solís en el marco de los operativos por un clásico que se disputó en Maldonado.
Este jueves, la fiscal a cargo del caso, Ana Carolina Dean, acordó con la defensa del futbolista, encarada por la abogada Karen Pintos, en un juicio abreviado. Schiappacasse fue condenado a 14 meses de prisión. Los dos meses y 12 días de prisión efectiva que se dispusieron se cumplieron este jueves. El resto será en régimen de libertad a prueba: seis meses de arresto domiciliario total, con autorización para entrenar y jugar los partidos de El Tanque Sisley.
El futbolista debe comunicar los horarios de los entrenamientos y fecha y hora de los partidos. Una vez cumplida la prisión domiciliaria, deberá presentarse en la seccional policial del domicilio fijado una vez por semana y hacer trabajo comunitario durante cuatro horas semanales. Tiene prohibición expresa de concurrir a cualquier tipo de espectáculo deportivo, excepto cuando vaya como integrante del plantel a jugar los partidos.
Cuando fue detenido, en verano, se determinó su prisión preventiva a la espera del juicio por comprar armas robadas y negociarlas con barras de Peñarol. Los delitos por los que se pidió su formalización fueron tráfico interno de armas, receptación y porte de arma de fuego en lugares públicos.
Estuvo privado de libertad en la Unidad 19 Florida, una de las cárceles de mayor convivencia del país. Fue visitado por el equipo técnico de Peñarol y exjugadores. También fue visitado por Luis Alberto Heber, ministro del Interior, en una recorrida que hizo por la cárcel esta semana.