La Justicia condenó al Ministerio de Salud Pública (MSP) a pagar 10.000 dólares al enfermero Marcelo Pereira, quien fue procesado con prisión junto a Ariel Acevedo en 2012, ambos acusados de haber asesinado a varios pacientes y que luego fueron absueltos por la Justicia.
Según informó El Observador, la demanda contra el MSP fue iniciada por Pereira a raíz de unas declaraciones en su contra hechas por el entonces subsecretario Leonel Briozzo, lo que le generó “un gran daño moral”, al ser “sometido al escarnio público”.
Pereira, que estuvo en prisión preventiva por tres años por el homicidio de 11 pacientes del hospital Maciel y la Asociación Española, señaló que el jerarca lo calificó públicamente como “asesino serial infiltrado en la salud”, y la entonces ministra Susana Muñiz le advirtió que no se acercara a la salud, lo que generó “un daño irreversible” para él y su esposa, que también trabajaba como enfermera en el Maciel.
El demandante se basó en el artículo 21 de la Ley 17.060, de 1998, que establece que los funcionarios públicos “observarán los principios de respeto, imparcialidad, rectitud e idoneidad y evitarán toda conducta que importe un abuso, exceso o desviación de poder, y el uso indebido de su cargo o su intervención en asuntos que puedan beneficiarlos económicamente o beneficiar a personas relacionadas directamente con ellos”.
Si bien Pereira pidió una indemnización de 80.000 dólares, la Justicia calculó la reparación por daños y perjuicios en 10.000.
El caso se conoció en marzo de 2012, a raíz de unas conversaciones en las que los enfermeros supuestamente se jactaban de los crímenes cometidos contra pacientes terminales. Los investigados llegaron a confesar los asesinatos en la sede policial y fueron procesados con prisión, pero en febrero de 2015 la Justicia los absolvió debido a que sólo tenían como prueba la confesión en la sede policial, de la cual se desdijeron y la atribuyeron a presiones de la Policía. Por los tres años de prisión indebida el Estado pagó a Pereira 200.000 dólares.