El fiscal especializado en Delitos Económicos y Complejos de 2° turno, Ricardo Lakner, pidió la formalización del proceso contra uno de los 15 policías investigados por la fuga del líder de la mafia calabresa, Rocco Morabitto, ocurrida en Cárcel Central en la noche del 23 de junio de 2019.
Si bien el fiscal Lakner informó sobre el pedido de imputación, prefirió no dar más detalles sobre el caso hasta que no se concrete la audiencia de formalización. Para eso, el Juzgado en Crimen Organizado tiene un plazo de 20 días desde que es notificado del pedido de la Fiscalía.
Desde la Dirección de Comunicación de Fiscalía advirtieron que la investigación continúa sobre los otros efectivos investigados y se estima que habrá más pedidos de formalización.
A mediados de marzo, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, le transmitió al fiscal de Corte, Juan Gómez, su preocupación por la falta de avances en la investigación. “Estamos preocupados por la demora en resolver el caso de la responsabilidad policial que hubo en la fuga de Morabito de la Cárcel Central”, expresó Heber en rueda de prensa.
En setiembre de 2020 el fiscal Lakner realizó una reconstrucción del caso, en la que convocó a los 15 policías que integraban la guardia en Cárcel Central, cuando el italiano Rocco Morabito se fugó junto a otras tres personas privadas de libertad.
La reconstrucción del hecho comenzó a las seis de la mañana y se extendió por varias horas, dado que el equipo de la Fiscalía generó un sistema para que los testigos permanecieron incomunicados entre sí durante la audiencia y recorrió con cada uno de los convocados el cuarto piso de la Cárcel Central, tomándose más de una hora con cada testigo. Para el fiscal, la incomunicación y que la reconstrucción se realizara en una sola audiencia era clave para la calidad de la información que se obtuviera. Si bien después de esa instancia, la Fiscalía manifestó estar cerca de concluir la investigación preliminar, no hubo novedades de la causa hasta ahora.
El fiscal cuenta en la carpeta investigativa con un informe del departamento de Asuntos Internos del Ministerio del Interior y otro de la Subdirección Nacional de Policía, que reveló la existencia de varias reuniones, que podrían estar vinculadas con la fuga, entre Morabito y Gerardo González Valencia, presunto integrante del cartel mexicano Los Cuinis, recientemente extraditado a Estados Unidos.
Según la información preliminar, Rocco Morabito, Ruben Díaz, Matías Acosta y Leonardo Sinopoli se fugaron tras arrancar una ventana y cortar el tejido de un ducto de ventilación, lo que les permitió acceder a la azotea. De esa forma, llegaron al edificio lindero de Cárcel Central por la ventana de uno de los apartamentos, le pidieron dinero y las llaves a la dueña y salieron por la puerta principal del edificio. De ahí corrieron a 18 de Julio y Ejido, donde tomaron un taxi hasta una pizzería en Punta Carretas.
El dueño de la pizzería Eatalian Style los llevó en un Fiat Mobi a la ciudad de Minas y, tras dejar a los acompañantes de Morabito, regresó con el italiano a Punta Carretas. Todos los que participaron de la fuga fueron detenidos. A los tres días, fue detenido Sinopoli en la terminal de Salto, cuando buscaba un medio para llegar a la frontera con Brasil, mientras que Acosta y Díaz fueron detenidos una semana después en una casa en Minas. Morabito fue detenido el 24 de mayo de 2021 en un hotel de la ciudad brasileña de João Pessoa, en el estado de Paraíba.