La Justicia recibió una solicitud de concurso necesario contra la empresa Somicar SA, que opera el frigorífico Frigo Salto, ubicado en el departamento homónimo. El pedido se efectuó ante la Justicia la semana pasada, según recogió El País y confirmó la diaria con el abogado y miembro de la Liga de Defensa Comercial (Lideco) Fernando Cabrera.

Cabrera explicó que la solicitud data de “días atrás” y que los propietarios de Somicar, una vez notificados, cuentan con diez días para cursar una respuesta con documentación probatoria que les permita “demostrar que [la empresa] no se encuentra en situación de insolvencia”. De no lograrlo, o de acceder al pedido, la Justicia tiene la potestad de decretar el concurso que permita formular “una oferta de pago” a todos sus acreedores, explicó.

Según consignó el diario Cambio de Salto, el adeudo que mantiene el frigorífico sería de ocho millones de dólares, que se distribuyen entre consignatarios de ganado y productores, así como empresas proveedoras de insumos y servicios.

El establecimiento es el segundo cuya actividad se ve resentida por problemas económicos, luego de que el frigorífico Casa Blanca, ubicado en Paysandú, enviara a 450 trabajadores al seguro de paro producto de una deuda de 27,7 millones con Conexión Ganadera este lunes.

Coincidentemente, este lunes se decretó el concurso de Conexión Ganadera, lo que significa que, de decretar el concurso de Somicar, sería el segundo en el sector este año.

Consultado sobre las posibles repercusiones que el concurso pueda tener en la actividad de la empresa, Cabrera dijo que “la ley es muy amplia en ese sentido” y que contempla una variedad de mecanismos que permiten conformar “una propuesta de pago”, algo que “no significa el cierre de la planta”. “La ley de concursos aspira a que continúe la actividad del concursado mientras está en concurso”, aclaró, aunque añadió que “el síndico tendrá que ver, porque si la actividad es deficitaria, no va a poder seguir adelante”.

Desde la empresa afirmaron al sindicato que accederían a un concurso de acreedores

La posición en la que se encuentra el establecimiento preocupa a la Federación de Obreros de la Industria de la Carne y Afines (Foica). Su presidente, Martín Cardozo, dijo a la diaria que es una “situación compleja”.

Cardozo dijo que si bien no está al tanto de la solicitud de concurso necesario, representantes de la empresa comunicaron al sindicato que accederían a un concurso de acreedores voluntario con la intención de “captar algún inversor que pueda hacer frente a la deuda y retomar las actividades”.

Según dijo, las autoridades dieron a entender que la situación que atraviesa el frigorífico se vio profundizada por la “desconfianza” que el quiebre de Conexión Ganadera suscitó entre sus proveedores, quienes “prendieron las alarmas” ante la situación, si bien no afirmaron que eso fuese un factor directo a la hora de tomar la decisión.

Esto se alinea con una de las declaraciones de uno de los consignatarios al citado medio, que dijo que el frigorífico deberá, sumado al pago de deudas, “conseguir capital de giro, porque nadie va a cargar sin cobrar primero”. A causa de ello, Frigo Salto, que procesó 33.300 bovinos y 107.640 ovinos el año pasado -con una incidencia de 1,5% y 11,2% en dichos rubros en nuestro país, respectivamente-, no faenó en lo que va del año.

Tampoco faena desde el año pasado Sidercol SA, que opera el frigorífico Daymán Meat, al que se suma el cierre de los frigoríficos Rosario y Lorsinal en 2023 por adeudos.

Por motivo de ello Frigo Salto envió a casi 300 trabajadores al seguro de paro, recordó Cardozo, y dijo que “los jornales legales” que contempla el mecanismo “se agotaron”, por lo que se está “gestionando” su extensión. Según dijo, eso “ya está encaminado”, aunque recordó que una de las condicionantes de ello es la viabilidad del emprendimiento implicado. De todas formas, agregó que al Poder Ejecutivo “a veces no le queda otra” que acceder, ya que no hacerlo incidirá no sólamente en los ingresos de los trabajadores, sino también indicadores como el desempleo.

El presidente de la Foica no descartó que pueda haber formas de “ayudar” a la resolución del conflicto, pero dijo que la situación se torna dificultosa en el corto plazo, y comparó la situación con aquellas que atravesaron Daymán, Rosario y Lorsinal, que también mantenían “deudas millonarias” y tampoco tenían “nadie que les vendiera una vaca si no era al contado”. “Para un capital nacional está muy cuesta arriba”, ilustró.