El uruguayo Federico Ezequiel Santoro Vassallo, de 46 años, considerado el responsable de crear la estructura financiera de la organización criminal liderada por Sebastián Marset, se declaró culpable del delito de lavado de activos provenientes del narcotráfico, según informó este miércoles la fiscalía estadounidense del distrito Este de Virginia.
En el comunicado, la fiscalía plantea que la acusación contra Santoro Vasallo lo identifica como “un estrecho colaborador” de Marset que se desempeñó en la organización “como blanqueador de dinero transnacional para organizaciones del narcotráfico y facilitó el traslado de millones de dólares provenientes del narcotráfico desde diversos países”.
“Santoro y sus cómplices organizaban la recaudación de las ganancias del narcotráfico y utilizaban mensajeros para entregar de forma encubierta grandes cantidades de dinero ilícito, generalmente en euros. Los cómplices de Santoro se especializaban en introducir el dinero ilícito en el sistema bancario global y luego Santoro dirigía la transferencia internacional de los fondos, generalmente mediante transferencias bancarias en dólares estadounidenses”, que luego eran transferidos en Estados Unidos.
La acusación de la fiscalía señala que el uruguayo utilizó al menos siete empresas para facilitar la transferencia de dinero y “ocultó la ubicación y la propiedad de los activos blanqueados mediante el uso de empresas” de diversos rubros registradas en América del Sur y Asia, ocultando el origen de los fondos mediante la falsificación de facturas que justificaban las transferencias bancarias.
La investigación, a cargo de los fiscales federales adjuntos Anthony T Aminoff y Catherine Rosenberg, plantea que Santoro movió al menos ocho millones de dólares en menos de cinco meses. “En enero de 2021, a Marset supuestamente se le adeudaban más de 17 millones de euros procedentes de un único envío de cocaína. Santoro organizó la recaudación y el blanqueo de al menos cinco millones de euros de esos fondos, la gran mayoría de los cuales se blanquearon a través del sistema bancario estadounidense”, sostiene el comunicado de la fiscalía.
El uruguayo había sido detenido a fines de agosto de 2023 en un operativo de la Secretaría Nacional Antidrogas en Alto Paraná, que implicó más de diez allanamientos en la zona de Ciudad del Este, desde donde operaba Santoro hasta que en febrero de 2022, cuando la organización criminal fue desbaratada en la operación A Ultranza, se trasladó a la ciudad brasileña de Foz do Iguaçu, del otro lado de la frontera.