La fiscal especializada en Estupefacientes de cuarto turno, Angelita Romano, pedirá la formalización del proceso contra las seis personas detenidas durante el operativo Nueva Era, en el que fueron incautados 2.000 kilos de cocaína en una chacra en Punta Espinillo. El operativo, que implicó tres allanamientos en Montevideo y Canelones, fue el resultado de una investigación que se inició en abril y que implicó seguimientos e interceptación de comunicaciones a un grupo criminal que estaría vinculado al clan familiar Los Albín, que opera en coordinación con la organización de Sebastián Marset. Sólo uno de los detenidos tiene antecedentes penales.

En una conferencia de prensa, el ministro del Interior, Carlos Negro, dijo que se trata de una incautación “histórica en el país” y “muy importante en Uruguay y seguramente en cualquier parte del mundo, por el valor que significa este tipo de drogas y la cantidad”. “La Policía Nacional le ha dado un duro golpe al narcotráfico en el día de ayer, y estamos muy orgullosos de estar a cargo y al frente de nuestra policía”.

Por su parte, el director de la Policía Nacional, José Azambuya, valoró la incautación y señaló que, más allá de la línea estratégica establecida por el MI en el combate al narcotráfico, “es importante el resultado desde el punto de vista táctico y operativo”. “Estos resultados no se obtienen si nosotros no tenemos una policía capacitada, entrenada, que hace uso de la tecnología, de la información y el análisis, de la normativa, y que puede trabajar plenamente en equipo. Todas aquellas capacidades que la Policía Nacional tiene en cada una de sus unidades y recursos humanos la va a utilizar para combatir plenamente a toda aquella modalidad delictiva que afecte nuestra soberanía”, destacó.

Además, Azambuya destacó el trabajo de coordinación con la Prefectura Nacional Naval. Dijo que es “un mensaje de que las instituciones pueden trabajar coordinadas, tomando en cuenta los recursos que cada una tiene y sumar más recursos para neutralizar aquellas situaciones que afectan a nuestro país”. También destacó el rol de la Fiscalía en “allanar el camino” desde el punto de vista normativo para avanzar en la investigación y obtener resultados.

Azambuya destacó el apoyo del MI y de la Dirección de la Policía Nacional, que contribuyeron “a cuidarlos y darles las herramientas” en este tipo de operaciones. Señaló, además, que las investigaciones requieren la recolección de evidencia y relacionar elementos para llegar a un resultado final.

Por su parte, el Director de Investigaciones, Julio Sena, dijo que la investigación surgió a partir de información obtenida en abril sobre un grupo encargado de aportar la logística para el traslado de la cocaína a través del puerto, con destino presuntamente a Europa, donde podría alcanzar un valor de 50 millones de dólares. Por el volumen descartan que se trate de un cargamento para consumo interno. Sena dijo que si bien los equipos policiales cuentan con tecnología y herramientas de análisis para todas las investigaciones, “siempre el factor humano es fundamental” porque “quienes analizan la información y toman las decisiones son los profesionales de la Policía”.

Consultado sobre si hubo coordinación con policías de otros países para localizar el cargamento, el ministro Negro respondió que se trató de una operación “netamente nacional”.

En la conferencia participó también el prefecto del puerto de Montevideo, Néstor Lemos, quien señaló que “tanto la Prefectura como la Armada están a disposición” para trabajar en conjunto en este tipo de operaciones. Desde el ministerio destacaron el trabajo conjunto de la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas, la Guardia Republicana, la Policía Científica, el Centro de Comando Unificado y la Prefectura Naval. Negro dijo que le comunicó directamente al presidente sobre el hallazgo, al que calificó de importante para el nuevo equipo del ministerio, pero “más importante aún para la Policía”.