Al realizar su último balance de gestión de gobierno, el presidente Luis Lacalle Pou sostuvo que el país “está mejor que en 2019” en materia de seguridad. Sin embargo, un repaso por los números fríos del Observatorio de Criminalidad del Ministerio del Interior revela que en Maldonado varios delitos van en aumento y que algunos, como los homicidios, tuvieron el pico de la última década en 2020.

Si se consideran las cifras registradas en la última década (2013 a 2023) por el Observatorio de Criminalidad, la máxima cantidad de estos delitos en el departamento se dio en 2020, con 24 casos. Aunque bajaron en los dos años siguientes (15 en 2021 y 12 en 2022), en 2023 volvieron a subir, hasta alcanzar los 19 casos.

Es decir que, mientras las estadísticas oficiales muestran que entre 2022 y 2023 los homicidios tuvieron una variación a la baja de 0,3% a nivel nacional, en Maldonado hubo un incremento de 58% de un año a otro. Esto, sin considerar los casos caratulados como “muertes dudosas”, de los que no se conocen registros departamentales.

El observatorio también desglosa los homicidios según el lugar donde se registraron: 31% de los casos del año pasado se registró en la jurisdicción policial de Maldonado Nuevo, seguido por el resto de la capital departamental y San Carlos, con 26,3% de los casos en cada ciudad.

Rapiñas

En el período comprendido entre 2013 y 2023, las denuncias por rapiña tuvieron su máximo en 2019, con 731. Aunque bajaron drásticamente en los años de pandemia (449 en 2020 y 294 en 2021), desde entonces han ido en aumento: 344 en 2022 y 398 en 2023. Esto implica una variación al alza de 15,6% de un año a otro, mientras que a nivel nacional las denuncias por este delito bajaron 4,4%, de acuerdo a los datos oficiales.

El 37,2% de las denuncias por rapiña se concentraron en Maldonado, seguida por Maldonado Nuevo con 34,4%. Bastante más lejos aparece San Carlos, en tercer lugar, con 8%.

Violencia doméstica

Las denuncias por violencia doméstica comenzaron a aumentar notoriamente desde 2019, año en que se registró el pico mínimo de toda la década en consideración (1.218).

Al cierre de 2023 las denuncias registradas en Maldonado habían trepado a 2.631, el mayor guarismo de los últimos diez años. No obstante, la variación de casos entre 2022 y 2023 resultó en Maldonado de 2,6%, mientras que el comparativo a nivel nacional dio un incremento del 3,9% para este tipo de delitos.

El 30% de los casos de violencia doméstica fueron denunciados en Maldonado, mientras que en segundo lugar aparecen Maldonado Nuevo (23%) y luego San Carlos (19%). Lejos, en cuarto lugar, figura Piriápolis, con un 9%.

El único delito que cayó sistemáticamente desde 2020, cuando se registró el pico de la década en el departamento, es el abigeato. En 2023 solamente se denunciaron 30 casos, frente a los 82 de 2020 y 66 de 2019.

Los números y la percepción ciudadana

La semana pasada el diputado frenteamplista Eduardo Antonini se reunió con el ministro del Interior, Nicolás Martinelli, para plantearle la situación de inseguridad “nunca antes constatada” que acusan las diferentes localidades de Maldonado y para pedirle una respuesta mayor.

Al término del encuentro el legislador dijo que le mostró al ministro los resultados de un pedido de acceso a la información pública realizado a la cartera por el senador frenteamplista Charles Carrera. Sobre esto, apuntó que los delitos no sólo “están aumentando de año en año en Maldonado”, sino que las cifras oficiales no reflejan el “real sentir” de los vecinos y vecinas, que “permanentemente” le manifiestan su preocupación por la inseguridad.

El incremento en la victimización que registró en 2020 la encuesta del Latinobarómetro con respecto a 2018, más las encuestas domésticas que muestran una opinión negativa de la ciudadanía con respecto a la gestión en seguridad, parecen fundamentar esa opinión.

De todos modos, Antonini le dejó “una carpeta” al ministro con los titulares de prensa que reflejan “la virulencia” de los crímenes, que tienen “muy preocupada” a la población del departamento. Copamientos con torturas, personas calcinadas, ejecuciones en la vía pública, casas baleadas o incendiadas, enumeró.

“Más allá de los robos de todos los días de motos, garrafas y celulares, hay una diferencia con los números oficiales en el sentir de las personas”, insistió el diputado en una rueda de prensa.

También marcó que las denuncias por hurto vienen aumentando desde la pandemia. En 2021 se registraron 7060, en 2022 hubo 7.911 y el año pasado treparon a 8.291. Esto implica un incremento de 4,8% en 2023 con respecto al año anterior, consideró. Pero Antonini entiende que muchos hurtos no quedan registrados debido a que las personas no denuncian, por temor a represalias de los denunciados o porque la burocracia las desestimula.

En el caso de la capital fernandina, comentó que las personas deben denunciar personalmente en la comisaría y luego ratificar su denuncia a una distancia de “veinte minutos en auto” en el área de investigaciones: “Mucha gente no denuncia porque pierde el día de trabajo” en el trámite.

Directivas “fuera de la realidad”

Desde las gestiones de Jorge Larrañaga y Luis Alberto Heber, hasta la actual de Martinelli, el legislador sostiene que “en Maldonado la Policía es profesional y resuelve delitos”, pero “no los previene” porque las directivas del Ministerio “no están acordes a la real situación”.

A modo de ejemplo, mencionó el incremento de la violencia a partir del realojo de las primeras familias del asentamiento Kennedy, donde en tres días hubo cuatro casas incendiadas y múltiples balaceras, en las que un hombre fue asesinado y otro quedó gravemente herido. “Tenían que haber previsto que estas situaciones podían pasar, y no lo hicieron”, dijo Antonini a la diariaantes de reunirse con Martinelli.

Antonini espera una respuesta del ministro, a quien además invitó a recorrer el departamento.

Entretanto, la diaria solicitó una entrevista al jefe de Policía, Erode Ruiz, para analizar los datos oficiales sobre criminalidad y obtener mayor información sobre la actuación de la fuerza policial en el departamento. A través de la vocera de la institución, el jefe rechazó la propuesta y argumentó que “no está autorizado a hablar de temas generales”.