Tras el incendio de un tubo de luz en el pasillo central del liceo 1 de San Carlos, registrado sobre las 20.10 del miércoles, mientras transcurrían las clases del turno nocturno, la filial carolina de la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) emitió un comunicado a la población para advertir que “no se trató de un hecho aislado”. El gremio señaló que la falla eléctrica es consecuencia del profundo deterioro del centenario edificio por falta de un mantenimiento adecuado, y denunció la falta de medidas de seguridad contra incendios.
“Desde el comienzo de las actividades del año, en febrero, ya se contaba con dos de los tres pasillos sin electricidad por fallas en el tendido eléctrico. Cabe destacar que, en esta oportunidad, el suministro eléctrico no se interrumpió automáticamente, sino que se debió realizar de manera manual por un funcionario, puesto que no saltaron las diferenciales, ni llaves generales. Esto demuestra que no hay protección por sobrecarga”, indicó Fenapes con respecto al incendio que obligó a suspender las clases matutinas este jueves.
El gremio resaltó que el edificio del liceo no ha contado, hasta el momento, con un mantenimiento adecuado. Esto “se evidencia en las filtraciones de agua en las conexiones eléctricas, resquebrajamiento de paredes y techos, la falta de mobiliario básico para el normal funcionamiento del centro –sillas, bancos, escritorios–, así como agujeros en el piso de los contenedores que funcionan como salones”, detallaron los profesores.
Sin alarma ni protocolo ante incendios
Según Fenapes, en los salones del liceo las fallas eléctricas son “una constante”: unos no tienen luz, mientras que en otros se registran “situaciones riesgosas”. La situación descrita presenta un agravante: la institución no cuenta con alarma contra incendios y tampoco con un “protocolo claro” de evacuación que determine “puntos de encuentro, preparación de docentes y señalización”, sostuvo el gremio.
Fenapes recordó que las escuelas y liceos de todo Maldonado “sólo cuentan con un electricista”, lo cual evidencia la importancia del mantenimiento constante de las instituciones educativas y la necesidad de contar con un mayor presupuesto y mayor cantidad de profesionales, sobre todo en este departamento densamente poblado.
Mientras se espera una respuesta de la Dirección General de Educación Secundaria (DGES), el gremio pedirá a la dirección del centro educativo que ordene una inspección de Bomberos.