América Latina viene siendo un terreno de disputa entre Estados Unidos y China, debido a que la histórica y tradicional hegemonía que han tenido en la región los gobiernos de Washington está siendo cada vez más desafiada por la expansión de los capitales provenientes del país asiático. En este contexto, Argentina es uno de los terrenos en pugna y es por eso que en los últimos días llegaron a Buenos Aires varios altos funcionarios de la administración que lidera Joe Biden, con la finalidad de intentar marcar la cancha en varios aspectos estratégicos.

La última jerarca de Washington en llegar a Argentina fue la generala Laura Richardson, la jefa del Comando Sur estadounidense. De acuerdo a lo que informó la agencia Télam, Richardson se reunió el lunes con el ministro de Defensa argentino, Jorge Taiana. Este último informó en su cuenta de Twitter que en el encuentro con la militar estadounidense dialogó “sobre varios temas en materia de defensa”. Entre esas cuestiones, el ministro describió “los acuerdos bilaterales vigentes, la jerarquización de las Fuerzas Armadas, el equipamiento militar y la prioridad estratégica que la Argentina le asigna al Atlántico Sur”.

La visión de Richardson sobre América Latina es conocida y fue explicitada por ella misma hace poco tiempo, cuando calificó a la región como el “patrio trasero” de Estados Unidos. A principios de marzo, en una intervención ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes estadounidense, Richardson dijo: “América Latina está llena de recursos y nos preocupa la actividad maligna de nuestros adversarios [China] que se aprovechan de ello, aparentando que están invirtiendo cuando en realidad están extrayendo”. Luego, Richardson agregó sin ambages refiriéndose a la relación de su país con América Latina: “Hemos ignorado nuestro propio patio trasero”. En esa intervención, Richardson advirtió a los legisladores sobre la extracción de litio en Bolivia, Argentina y Chile por parte de empresas chinas.

La visita de Richardson a Buenos Aires también generó un nuevo cruce entre la vicepresidenta, Cristina Fernández, y el diario Clarín, conglomerado mediático que es enemigo declarado de la exmandataria desde hace casi dos décadas.

En este caso, el motivo del choque fue que el medio publicó una nota en la que informaba sobre la presencia de la jerarca estadounidense y a la vez decía que esta había rechazado tener una entrevista con la líder peronista. Pero este martes Fernández desmintió a Clarín en un mensaje que escribió en su cuenta de Twitter.

“Hace casi un año, el 26 de abril de 2022, recibí en mi despacho del Senado de la Nación a la generala Laura Richardson y al embajador de Estados Unidos, Marc Stanley, por pedido de este último. Este año, ni nosotros hemos solicitado una reunión con la generala Richardson, ni la embajada lo ha hecho con nosotros. Una vez más y como siempre… CLARÍN MIENTE”, expresó la vicepresidenta argentina.

FMI, aviones y energía nuclear

A fines de marzo el presidente estadounidense, Joe Biden, recibió en la Casa Blanca al presidente Alberto Fernández. En dicha instancia el mandatario argentino le pidió y recibió de su par estadounidense apoyo en las gestiones con el Fondo Monetario Internacional (FMI). En esa línea, la semana pasada visitó Argentina la número dos del Departamento de Estado estadounidense, Wendy Sherman, quien se reunió, entre otras autoridades, con el ministro de Hacienda, Sergio Massa, y con el canciller, Santiago Cafiero.

En una conferencia de prensa consignada por Ámbito Financiero la diplomática dijo que “hay un programa entre la Argentina y el FMI y lo que negocian es algo que Estados Unidos apoya”. “Quiero felicitar a la Argentina por las revisiones que están yendo muy bien”, señaló Sherman.

Ante una consulta sobre la imposibilidad de Argentina de comprar aviones y la oferta vigente por parte de China, la funcionaria dijo que “hay conversaciones en curso” entre Argentina y Estados Unidos que “están yendo en un rumbo muy positivo”.

Otra cuestión que preocupa a Washington es el acuerdo firmado entre Argentina y China para la construcción de una nueva central nuclear en el país vecino, que contará con el aporte tecnológico chino. En caso de que el acuerdo finalmente se concrete, la nueva central será la cuarta de este tipo que hay en Argentina, donde ya funcionan las de Atucha I y Atucha II, ubicadas en la localidad de Lima, en la provincia de Buenos Aires, y la de Embalse, en la provincia de Córdoba. Fue por este motivo que la semana pasada viajó a Argentina el presidente de la Comisión Reguladora Nuclear de Estados Unidos, Christopher Hanson, quien visitó las centrales y advirtió, según informó Página 12, sobre los riesgos y la “inconveniencia” de asociarse con el país asiático en este rubro.