Opción Consultores presentó este miércoles una nueva encuesta sobre el referéndum para derogar 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC) en Telenoche.

De acuerdo con estos datos, si el referéndum fuera mañana, 39% votaría a favor de la norma y 37% en contra. 24% sigue sin definir qué votará, mientras 5% lo haría en blanco o anulado.

Esta es la primera vez que quienes votarían a favor de la LUC superan a quienes lo harían en contra. Desde febrero el respaldo a la norma creció de 33% a 39%, mientras el rechazo bajó de 40% a 37%. En tanto, el porcentaje de indecisos se mantiene elevado, por encima del 20%, e incluso creció con respecto a la medición anterior, que se realizó en agosto y se difundió en setiembre.

Si se repregunta a los indecisos por qué opción se inclinan más, las dos opciones aumentan de forma similar: la intención de voto por la mantención de la norma pasa de 39% a 43%, mientras el respaldo a la derogación pasa de 37% a 40%.

Si se compara la intención de voto para el referéndum con el voto en las elecciones pasadas, se refleja, nuevamente, que la mayoría de los que respaldaron al Frente Amplio (71%) apoyarían la derogación de la LUC. En tanto, la mayoría de quienes votaron por los partidos de la coalición multicolor tienden a querer mantener la norma (63%).

Una particularidad es que, entre quienes votaron por el Frente Amplio, 18% votaría por la opción contraria a la que respalda el partido, o sea, para mantener la norma. En cambio, entre quienes respaldaron a la coalición multicolor solo 11% votaría por la derogación.

El análisis de Opción

“Dado que para derogar la ley es necesario superar la mayoría absoluta de los votos válidos (donde se incluyen los votos en blanco), los promotores de la derogación estarían precisando cerca de dos tercios de los indecisos para alcanzar su objetivo”, señala Opción en su análisis.

La consultora señala que esta última encuesta “confirma el panorama de ventaja actual para el oficialismo, en la medida que (con esta repartición de los indecisos) para la derogación de la ley sería necesario conseguir más de 80% del apoyo de los indecisos duros”.

Sin embargo, también señala que “el escenario está abierto por varias razones”: porque falta tiempo para la celebración del referéndum, que sería en marzo o abril de 2022, porque todavía no hay una actitud proactiva de los votantes de buscar información sobre la norma y porque las campañas todavía no intensificaron su actividad. “En este sentido, los promotores de la derogación tienen un activo a su favor: cuentan con la capacidad de movilización tanto de la principal fuerza política del país (el Frente Amplio) como de varias organizaciones sociales relevantes, muy especialmente el PIT-CNT”, concluye Opción Consultores.