El Poder Ejecutivo tomó la decisión de aplazar la fecha anunciada previamente para la implementación del nuevo mecanismo de portabilidad numérica, que surge de la ley de urgente consideración (LUC) y permite cambiar de compañía telefónica manteniendo el número. El Sindicato Único de Telecomunicaciones (Sutel) tenía previsto para este lunes un paro en rechazo a la activación de la portabilidad numérica, que fue suspendido el jueves al enterarse de la postergación, y el gremio mantiene el planteo de que la puesta en marcha sea suspendida hasta el referéndum de finales de marzo.

Según informó el director nacional de Telecomunicaciones, Guzmán Acosta y Lara, se está “a punto de terminar” la fase de pruebas técnicas con la empresa seleccionada como administradora de la base de datos, publicó El Observador. Al no haberse alcanzado el 100% de los testeos sobre la operatividad del nuevo sistema, se aplazó su implementación y se prevé anunciar en los próximos días una nueva fecha.

“Sería una irresponsabilidad decir una fecha cuando estamos probando hace un mes. Venimos muy bien, con mucho trabajo en conjunto de las tres empresas (Antel, Claro, Movistar). Son procesos técnicos y de ingeniería que tienen que salir bien, que es lo que queremos garantizar. No va a ser el lunes [por ayer], pero será en los próximos días”, afirmó Acosta y Lara al programa En perspectiva de Radiomundo.

Pablo Siris, director de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec) por el Frente Amplio, dijo a la diaria que ha venido planteando en el directorio “que se publique el nuevo cronograma, tras haber sido modificado en varias oportunidades por el proceso de llamado para el administrador de la base de datos”.

A su vez, Siris explicó que “en la última sesión del directorio [de Ursec, la semana pasada] se nos informó que se había determinado que los anuncios sobre el cronograma así como la decisión del tema iba a ser algo a determinar por el Poder Ejecutivo”. Según el director por la oposición, “no es lo que corresponde; la normativa aplicable indica que la Ursec es el organismo encargado de la implementación de la portabilidad numérica”.

Tras el proceso que disparó la LUC, se creó un comité de portabilidad numérica con representantes de distintos organismos y las tres empresas telefónicas. A posteriori se llamó a una licitación en busca de una empresa que se encargara de la administración de la base de datos; fue seleccionado un consorcio formado por las firmas Cleartech y Cietel, que pidió una prórroga para completar los trámites necesarios.

Inicialmente el gobierno pretendía lanzar la portabilidad numérica a mitad de año, luego lo pasó para noviembre, después para antes de las fiestas, y “ahora se maneja el día 29 de diciembre”, comentó a la diaria el presidente de Sutel, Gabriel Molina. Esta fecha aún no se oficializó, y el sindicalista cuestionó tanto la posición del gobierno de mantener la activación del mecanismo pese al referéndum así como también los anuncios de que se consensuará con las empresas la mejor fecha para hacerlo, tomando en cuenta aspectos comerciales.

“Venimos reclamando hace tiempo al gobierno y al directorio de Antel, cuestión en la que insistiremos, que la mejor forma de defender la empresa pública es suspender la portabilidad numérica hasta el referéndum, para que la gente decida con su voto. No se puede hacer de un día para el otro, se requiere un tiempo para prever y que esto no termine siendo peor de lo que ya es para los intereses del país”, expresó Molina.

Sutel entiende que habilitar el pasaje de una compañía a la otra sin perder el número no es una innovación ni genera grandes beneficios al usuario, ya que hoy día por ejemplo el servicio de Whatsapp actualiza de forma automática un eventual cambio de número.

Molina dijo que la portabilidad numérica es “un sistema perverso” que “va a terminar perjudicando a Antel”, y será “un negocio para las multinacionales privadas que compiten con el ente”. De acuerdo a un estudio de opinión pública que encargó la empresa estatal, de habilitarse la opción de mantener el número habría un 25% de usuarios dispuestos a cambiar de compañía en el mercado, y Antel perdería en el saldo neto unos 20.000 clientes -hoy es la empresa líder- a manos de sus competidoras privadas.