A mediados de noviembre, en un space de Twitter, el senador Guido Manini Ríos, líder de Cabildo Abierto (CA), dijo que cuando se acercara la fecha del referéndum -27 de marzo- se tocaría “lo emotivo” en el discurso: “Después no se queje más cuando le maten al vecino, al hijo”. Si bien en los actos de todos los días no ha habido expresiones tan directas, la seguridad parece estar en el centro de la campaña del No; o al menos es sobre ese tema que se ponen más ejemplos a la hora de defender los 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC).
Sin ir más lejos, ayer el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, compartió un spot en Twitter en el que se señala: “Cuando un delincuente entra en tu propiedad y pone en riesgo tu vida o la de tu familia, la LUC te protege mejor si te defendés. La LUC ahora protege mejor al ciudadano y castiga al delincuente”.
Fuentes del comando de campaña del No señalaron a la diaria que hay un énfasis mayor en la seguridad porque es un eje “proporcional a la incidencia de los artículos en cuestión y también es el interés que mayormente manifiesta la opinión pública”, por lo tanto, “es natural que así sea”.
En tanto, el martes, en su audición de Radio Oriental, Manini Ríos dijo que tienen que saber bien “todos los ciudadanos” que si llega a ganar el Sí, “no va a salir gratis, cada uno va a sufrir las consecuencias de esa decisión”, y subrayó que las sufrirán “todos los uruguayos, hayan votado a quien hayan votado en 2019”. Destacó que en caso de derogarse la LUC, se perderán “muchas herramientas”, y puso como ejemplo que “no seremos dueños de nuestro número celular, no tendremos la posibilidad de escapar a la bancarización obligatoria, no tendremos los plazos acortados para el régimen de adopciones y no tendremos la posibilidad de alquilar sin garantías”.
Luego hizo énfasis en la seguridad. Dijo que, en caso de ganar el Sí, la Policía “no tendrá ciertas herramientas, no podrá hacerse respetar llevando ante el juez a alguien que agravie al policía, que lo escupa o insulte”. “No podrá tipificarse el delito de resistencia al arresto; no se podrá pedir documentos en determinadas circunstancias, no se podrá tipificar delito a aquellos que destrozan las cárceles; los violadores, asesinos y autores de delitos gravísimos van a tener la posibilidad de salir antes, redimiendo la pena. Va a haber limpieza de antecedentes a los menores el día que cumplen 18 años, aunque cometan delitos gravísimos. Todo eso va a ocurrir el 28 de marzo en caso de ganar el Sí”, sostuvo.
Luego dijo que le “cuesta entender” por qué “un uruguayo de bien, honesto, que los hay en todos los partidos”, puede “estar en contra del delito de agravio a la Policía”, o en contra de “que se le tipifique delito a aquel que se resiste al arresto”. “¿Por qué puede estar en contra un ciudadano honesto de que se le tipifique delito a aquel que destroza una cárcel o a aquel que se fuga de una cárcel? Creemos que los ciudadanos honestos, que son la inmensa mayoría de los uruguayos, y que los hay de todos los partidos -también frenteamplistas-, tienen que tener bien claro que esa herramienta que permite que la Policía actúe con más eficacia y eficiencia, y que sea respetada, cae el 27 de marzo”, insistió.
A su vez, ayer de tarde, en un acto de CA en la plaza Lafone, Manini siguió una línea discursiva similar, y dijo que si el 27 de marzo triunfa el Sí, “la realidad va a ser otra”, y la Policía “tendrá las limitaciones que tenía en la era [del ministro Eduardo] Bonomi, que no le permitía actuar a la Policía y que generó lo que todos sabemos”. “Ya no se va a presumir la legítima defensa del dueño de casa; ya no va a ser delito agraviar a la Policía, van a poder seguir insultando y escupiendo a los policías, como lo hemos visto una y otra vez. Van a poder volver a correr a pedradas un móvil policial que entra a un barrio a detener a alguien. Esas escenas las vamos a volver a ver todos a partir del 28 de marzo si triunfa el Sí. Tenemos que ser conscientes de eso”, subrayó.
Calabria: si se deroga la LUC, al menos “1.700 rapiñeros” podrán pedir la libertad anticipada
En tanto, el Partido Nacional sigue de gira por el interior, y ayer, en una conferencia de prensa en Paso de los Toros, Luis Calabria, director general de Secretaría del Ministerio del Interior, también se refirió a la seguridad. Dijo que, “como se nota, ha mejorado”, porque hubo tres modificaciones: cambió el mando, “a través” del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, el ministro Jorge Larrañaga en su momento y continuando luego con la gestión de Luis Alberto Heber. También cambiaron las “políticas de seguridad” y “las normas”.
“Justamente, la LUC tradujo la voluntad de cambio y le devolvió a la Policía herramientas para trabajar. Es una catarata de medidas de sentido común, y por eso son las mentiras que vienen del otro lado, de los detractores, porque no pueden argumentar contra medidas de sentido común”, sostuvo. Luego ejemplificó con la posibilidad que tiene la Policía de hacer “controles de identidad” en la calle, ya que si se deroga, “un inspector de tránsito que nos para y nos pide la libreta va a tener más herramientas que un policía”, algo que “no tiene lógica”.
Calabria subrayó que los opositores a la LUC decían que la legítima defensa presunta, “que era un reclamo del sindicato policial”, iba a generar “gatillo fácil”. Pero “quien mejor defiende a la LUC es la realidad”, ya que en 19 meses el “gatillo fácil” y “todos los pronósticos catastróficos que hacían los detractores no se cumplieron”, y hubo “menos abatidos por la Policía con LUC que sin LUC”. Agregó que con Larrañaga visitaron Tacuarembó en varias oportunidades, y uno de los reclamos que les hacían los ciudadanos era “el cumplimiento efectivo de las penas”. Destacó que “ese espíritu está en la LUC”, ya que el artículo 35 “limita la libertad anticipada a delincuentes violentos, como los rapiñeros”. “Si se deroga la LUC, habría al menos 1.700 rapiñeros que recobrarían ese beneficio. Sus abogados podrán luego pedir la libertad anticipada”, aseguró.
Zubía y los “muchachos con botellas” y a los “gritos”
En filas coloradas, un abanderado de la seguridad es el exfiscal y actual diputado Gustavo Zubía, que desde hace años ostenta un discurso contra lo que entiende que es la “benignidad” del sistema penal. En el reciente spot que compartió en sus redes sociales, Zubía va directo al grano: “¿No querés que los violadores salgan antes? ¿No querés que los delincuentes entren a tu domicilio como Perico por su casa? Entonces votá No. No dejes que te patotee la delincuencia”.
El lunes, en entrevista con la diaria, el diputado colorado dijo que a la hora de sentir inseguridad por la calle no da “el mismo temor” un “gordito de camisa y corbata” que “tres muchachos con cerveza en la mano a las carcajadas y empujándose”, y quienes lo niegan lo hacen “hipócritamente”. Ayer, en su cuenta de Twitter, Zubía insistió con el tema y escribió: “La LUC no habla de personas con apariencia delictiva sino de hechos con apariencia delictiva. Pero yo sí hablo, aunque los hipócritas de siempre salten. No es lo mismo que en la calle, de noche, se te acerquen tres muchachos con botellas y gritos que gente de trabajo. Hipócritas”.
Un par de horas después Zubía hizo una encuesta en la misma red social, en la que insistió con su ejemplo, y preguntó a sus seguidores que contestaran con “sinceridad” si “en la calle les da lo mismo que se les acerquen tres muchachos con botellas en la mano y hablando fuerte, o prefieren que no se les acerquen”. Al cierre de esta edición, iba ganando la segunda opción, con 87%.