El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) presentó una resolución contra Rusia este viernes, que posteriormente fue vetada por el país liderado por Vladimir Putin. Ante esta situación, la normativa de la ONU prevé como camino alternativo que una mayoría pueda convocar a la Asamblea General de las Naciones Unidas para que tome una resolución. Este miércoles, finalmente se aprobó una declaración, por mayoría, llamada “Agresión contra Ucrania”.
A diferencia de la primera resolución, a la que Uruguay no adhirió, esta fue copatrocinada por nuestro país junto a otros 96 países. En el texto se puntualiza que “no se reconocerá como legal ninguna adquisición territorial derivada de la amenaza o el uso de la fuerza” y se condena la decisión de Rusia “de mejorar el nivel de preparación de sus fuerzas nucleares”.
Los países firmantes expresaron su “grave preocupación” por los “informes de ataques contra instalaciones civiles como residencias, escuelas y hospitales, y por las bajas civiles, en particular las de mujeres, personas mayores, personas con discapacidad y niños y niñas”. También se advirtió por el “deterioro de la situación humanitaria en Ucrania y sus alrededores, donde hay un número creciente de desplazados internos y refugiados que necesitan ayuda humanitaria”.
En ese sentido, se reafirmó el “compromiso con la soberanía, la independencia política, la unidad y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente, que se extienden a sus aguas territoriales”, y se condenó “en los términos más enérgicos la agresión cometida por la Federación de Rusia contra Ucrania”.
Asimismo, los países exigieron que se “ponga fin de inmediato al uso de la fuerza contra Ucrania y se abstenga de recurrir a cualquier otra forma ilícita de amenaza o uso de la fuerza contra cualquier otro Estado Miembro”. Se condenó también “todas las violaciones del derecho internacional humanitario y las violaciones y abusos de los derechos humanos”.
También se le solicitó a Rusia que “retire de inmediato, por completo y sin condiciones todas sus fuerzas militares del territorio de Ucrania dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente” y se condenó el reconocimiento de Donetsk y Lugansk como independietes por Rusia, “que constituye una violación de la integridad territorial y la soberanía de Ucrania y es incompatible con los principios de la Carta” de la ONU.
Por otra parte, se demandó que se garantice “el paso seguro y sin restricciones a destinos fuera de Ucrania y que faciliten el acceso rápido, seguro y sin trabas de la asistencia humanitaria a quienes la necesitan en Ucrania, que protejan a la población civil, incluido el personal humanitario y las personas en situaciones de vulnerabilidad”.
Este lunes, el embajador uruguayo, Carlos Amorín, había ratificado en la sesión de la Asamblea General de la ONU la “enérgica condena” de Uruguay a la invasión rusa en territorio ucraniano y manifestó que es “completamente inaceptable que la soberanía, la integridad territorial y la independencia de Ucrania sean avasalladas”.