A medida que se acerca el día de la votación en el referéndum sobre 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC), el clima de la campaña empieza a subir de tono, en particular con la diferencia que surgió entre los comandos sobre el mensaje final. Mientras que el Sí pidió una cadena de radio y televisión, el No optó por una conferencia de prensa del presidente, algo que se interpretó como “un cambio en las reglas de juego”.

Así las cosas, el martes el líder del Frente Amplio (FA), Fernando Pereira, decidió llamar al presidente Luis Lacalle Pou para aclarar la situación, según indicó Pereira a El País. El dirigente de izquierda dijo que tuvieron una conversación en la que intercambiaron sobre la necesidad de “mantener un clima de tolerancia y respeto”.

“Eso no implica esconder las diferencias, sino plantearlas con altura. Así se hace política en Uruguay, respetando ideas ajenas, tratando de que los desbordes verbales queden aislados”, agregó, y destacó que “todos tenemos que saber que la vida sigue después del 27, no se puede transformar las ideas y la pasión en odio; yo no lo hago”.

En particular sobre la conferencia de prensa que dará el presidente, Pereira se alineó con la postura de José Olivera, dirigente de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), quien había dicho que se cambiaron las reglas. “Nosotros consideramos que tendrían que haber existido dos cadenas de siete minutos; ellos tienen una posición contraria, pero siempre termina definiendo el soberano”, señaló, y reafirmó: “Para nosotros se cambiaron las reglas de juego por parte del No, pero eso no es obstáculo para ninguno de los dos. Él [Lacalle Pou] me explicó su punto de vista y yo el nuestro, que no tiene que ver con la fecha sino con el formato”.

Este viernes Pereira dijo en una rueda de prensa que “hay una diferencia, hacia el final de la campaña, sobre cómo debería ser la cadena; desde nuestro punto de vista, para que fuera ecuánime tenía que haber dos cadenas, entregado el material y que se sorteara cuál iba primero y cuál segundo”.

En este sentido, opinó que “no hay un problema de fechas, hay un problema de forma, una cadena va a ir en comparación con una conferencia de prensa de todos los medios que obviamente van a seguir y escuchar al presidente todo el tiempo que hable, todas las preguntas que le formulen, y eso construye una injusticia en el tratamiento del tema”.

“La exacerbación de la campaña lleva a desbordes verborrágicos”

Pereira también comentó los dichos de la vicepresidenta Beatriz Argimón en el último acto del No en Montevideo. La dirigente nacionalista dijo que hay un artículo que le parece muy importante: “A mí no me importa si un violador estudia y trabaja en la cárcel; que cumpla toda la pena”. Para el dirigente frenteamplista ese comentario se debió a que “la exacerbación de la campaña lleva a desbordes verborrágicos que no tienen ningún sentido”.

Para Pereira, “nunca la prisión fue un método de escarmiento, lo que dice la norma legal es que tiene que ser un instrumento de rehabilitación de las personas. Si no trabajan y no estudian, ¿cómo se van a rehabilitar?”.

“Como conozco bien a Beatriz y le tengo aprecio, parto de la base de que es la presión de una campaña que creían ganada y ya no sólo no está ganada sino que las tendencias van en sentido contrario, y eso a veces desespera”, dijo, y agregó: “Yo quiero para mi país lo mejor y para quienes están privados de libertad el mejor tratamiento, la mejor reclusión, la mejor educación y la mejor posibilidad de acceso al trabajo, y si eso lo logramos mediante un dialogo entre el gobierno y el FA, estamos dispuestos a dialogar”.

En este sentido apuntó a que se puede reducir “la pena si es necesario”. “No digo que nosotros embocamos en todo –eso es de una soberbia que nadie debería tener, y escuchar al otro es parte de la actividad política–, pero parto de la base de que si uno lee los informes de Juan Miguel Petit [comisionado parlamentario penitenciario] y los lee con objetividad, sabés que si no les das la oportunidad de trabajar y estudiar es para que salgan peor de lo que entraron a la cárcel”.