Partido Socialista: surge corriente que busca instalar un “nuevo clima de convivencia” interna y promueve una campaña de “reafiliación”

El nombre elegido para designar a la nueva corriente socialista aparece en el título principal del documento de 19 páginas que presentaron hace pocos días en la orgánica del Partido Socialista (PS), de cara a las elecciones internas que se celebrarán el 7 de agosto. La corriente se llamará Futuro Socialista y su documento fundacional está firmado por 36 militantes del sector frenteamplista, a los que se sumaron otras adhesiones en los días siguientes a la presentación, aseguran sus impulsores.

Entre los fundadores hay gente que proviene de la llamada “ala ortodoxa”, en la actualidad mayoritaria en el PS y que impulsa la reelección de Gonzalo Civila en la secretaría general, y también del “ala renovadora”, que para esa disputa propuso el nombre del exdiputado rochense Darcy de los Santos. La nueva corriente interna presentará un tercer nombre, pero todavía no definió quién será.

Los voceros de Futuro Socialista en esta etapa de presentación serán María Jossé Rodríguez, que fue coordinadora del Frente Amplio (FA) en la transición de 2021, y el edil por Canelones, Sergio Pereyra.

El nuevo grupo tiene una fuerte impronta de dirigentes socialistas del interior, que empezaron a intercambiar opiniones en los últimos meses. El PS tiene 23 ediles departamentales titulares -es la segunda bancada más importante del FA a nivel nacional- y seis de las 18 departamentales del FA en el interior están presididas por socialistas -Salto, Paysandú, Colonia, Rocha, Cerro Largo y Tacuarembó-.

“El origen del espacio está muy ligado a charlas que tuvimos entre varios compañeros en ámbitos como el Congreso Nacional de Ediles. Ahí empezamos a intercambiar sobre la situación del partido y a pensar propuestas por fuera de la lógica instalada de la disputa entre renovadores y ortodoxos”, explicó Pereyra, consultado por la diaria.

El edil canario asegura que en el espacio conviven militantes de las cinco listas que compitieron en la última elección interna de 2019, en la que Civila le ganó al candidato de la renovación, Santiago Soto, quien tenía el apoyo de tres listas.

Entre los firmantes del documento de Futuro Socialista que se presentó este fin de semana ante el Comité Central del PS hay otros cinco ediles: José Manuel Arenas (Colonia), Patricia Pelúa (Lavalleja), Javier Gutiérrez (San José), Eduardo Cánepa (Rivera) y Juan Pablo Rocca (Salto). También están la diputada suplente de Soriano Macarena Sierra, el exdiputado y expresidente de la Juventud Socialista Nicolás Núñez, y el exsecretario general del PS Manuel Laguarda, entre otros dirigentes.

“Un vaciamiento sucesivo y prolongado”

En un pasaje del documento, señalan que el PS atraviesa una crisis política pautada por un “vaciamiento sucesivo y prolongado del que nadie quiere hacerse cargo”. Esos problemas, según afirman, se han traducido en una “pérdida sistemática” del apoyo popular desde 2004 hasta la fecha. En ese proceso de caída electoral, que sustentan con una gráfica con los resultados, las elecciones nacionales de 2019 representan un “punto crítico”, ya que el PS perdió en esa instancia “prácticamente 50% de nuestro apoyo popular, obteniendo así la peor representación parlamentaria desde la reapertura democrática”.

Además, analizan que la llegada al gobierno en 2005 provocó que muchos cuadros socialistas que pasaron al Ejecutivo no pudieran sostener su “nivel de compromiso” con el PS y eso derivó en un “empobrecimiento del debate ideológico”, en paralelo al recrudecimiento de disputas de poder interno, según detallan.

“Desde los años 90 las luchas por el poder, sin una clara diferenciación ideológica, de las que todos fuimos responsables, desgastaron al Partido (...) Nuestra organización ‘se metió hacia dentro’ en una vida partidaria que lejos de ser funcional a los objetivos y metas históricas del PS se volvió cada vez más funcional a intereses de grupos de poder internos que están en pugna constante por la conducción del Partido”, agregan en el documento.

Esta situación, afirman, trasciende a la actual dirección y es responsabilidad de las dos corrientes más importantes del PS. “Sería poco serio decir que todos los problemas del Partido surgen a partir de la llegada de la actual dirección encabezada por el compañero Civila. Debemos reconocer que la minoría actual, que en el pasado fue mayoría, cometió una serie de errores que fueron encasillando al Partido en la actual situación que tenemos”. Esto lo señalan “en tono autocrítico”, ya que varios de los firmantes participaron “directa o indirectamente” en ese proceso.

La polarización como “método de convivencia” en el PS, cambios estatutarios que no dieron el resultado esperado, la falta de formación política y la desatención del trabajo político en los territorios -“evitar el macrocefalismo”- son otros aspectos que aparecen mencionados en el material de Futuro Socialista.

Por último, el documento propone un “nuevo pacto de convivencia” entre las corrientes socialistas, que implica cambiar “hábitos y costumbres adquiridas en los últimos tiempos”. “Requiere dejar de lado los revanchismos y poner por sobre todas las cosas al Partido. La solución no puede ser la purga ni los desprendimientos masivos, no debemos aceptar ni normalizar estas situaciones”, resumen. También plantean una “gira nacional de debate partidario”, revitalizar los Centros Socialistas, promover una “reorganización” de la Juventud Socialista y generar una “campaña de afiliación y reafiliación” al PS con la mira puesta en los militantes que renunciaron al PS en los últimos años por diferentes razones.