Este viernes el expresidente José Mujica fue sometido a una intervención médica que consistía en la colocación de un stent en el esófago. Según informó en el parte médico su médica personal, Raquel Pannone, la operación salió bien y, si bien estaba con dolor, ahora está “calmado” y “tranquilo”.
Pannone indicó que Mujica va a permanecer el fin de semana en la mutualista Casmu hasta “que esté mejor” y “que tolere por vía oral” la alimentación, y recién ahí va a poder “retornar al domicilio”.
La doctora recordó que el lunes se le realizó una endoscopía en la que se detectó que “el orificio de pasaje del esófago se había achicado tanto que no permitía el pasaje del alimento como venía recibiendo”. Es por eso que este viernes se le colocó un stent, que, según explicó Pannone, es un dispositivo metálico que “se adhiere a las paredes del esófago y se queda allí ampliando la luz del esófago y permitiendo el pasaje de alimentos”.
Señaló que la colocación del dispositivo “le va a permitir seguirse alimentando por vía oral, seguir recibiendo la comida como estaba recibiendo hasta ahora y mantener su recuperación en domicilio”.
En ese sentido, la doctora apuntó que ahora necesitan que el stent “se termine de expandir en las próximas 48 horas”, que es lo que prevén que suceda. Por eso Mujica va a permanecer en la mutualista, para controlar “las molestias que le puede generar la colocación del dispositivo”.
El expresidente culminó en junio el tratamiento de radioterapia por el cáncer de esófago que le fue diagnosticado en abril. En agosto, Pannone afirmó que el tratamiento fue muy bueno y que el equipo médico tenía “fuertes convicciones” de que el cáncer se había curado.
Sin embargo, la radioterapia tuvo efectos secundarios en el esófago, como el desarrollo de una fibrosis, lo que llevó a que en setiembre se le colocara una sonda directa al estómago para que se alimentara mejor, debido a las molestias que le causaba ingerir alimentos.