El presidente Luis Lacalle Pou participó este miércoles en el ciclo Desayunos Búsqueda, que organiza el semanario. Al ser consultado sobre las cifras de delitos de este período de gobierno, el mandatario sostuvo que “hay causas de la delincuencia que naturalmente hay que abordar, y no empiezan por el Ministerio del Interior ni por la Policía”.

“Son el último eslabón de toda esta cadena que es el que tiene que prevenir, reprimir el delito. Y ojo que esto está lejos de una justificación, pero las causas hay que trabajarlas”, acotó Lacalle Pou. En concreto sobre los números, Lacalle Pou dijo que no se pelea con ellos ni cuando es oposición ni cuando es gobierno, y marcó que bajaron 20% los hurtos, 26% las rapiñas, 50% los abigeatos y 3% los homicidios, lo que catalogó como “el delito más difícil”.

Según dijo, está en contra de hablar de la “sensación térmica” sobre seguridad porque es una “valoración totalmente subjetiva”. Sin embargo, se refirió a las últimas encuestas que muestran que la seguridad es la mayor preocupación de los uruguayos y dijo que “el grado de preocupación es alto, pero si ves el grado de preocupación que había en el quinquenio pasado, es sensiblemente menor”.

Esta baja, a su entender, se explica porque “es la primera vez en muchos años que hay una tendencia a la baja de los delitos, y no al alza”. De todas formas, señaló que no están “conformes”.

El caso Marset y la actuación de Roberto Lafluf

El mandatario siguió con la ronda de entrevistas y luego en radio Universal se refirió a la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset y a la renuncia de jerarcas de gobierno, luego de que la exsubsecretaria Carolina Ache presentara audios a la Justicia que daban cuenta de que se buscó esconder información del caso.

Consultado al respecto, reiteró que su exasesor Roberto Lafluf se “comió un garrón” y dijo que eso es independiente de las renuncias. “Las renuncias yo las tomo como alguien que dice: ‘Luis, yo te dejo las manos libres, yo no quiero ser obstáculo'. En ese episodio renunciaron cuatro personas. Las cuatro me llamaron y me dijeron: ‘Luis, yo renuncio, yo no quiero ser obstáculo', que no quiere decir que haya responsabilidad. Ayer lo mencioné sobre Roberto, y la Justicia lo resolverá, yo tengo mis convicciones”.

Reiteró que sabe “lo que pasó”, y que aunque el caso se está “sustanciando en la Justicia”, él tiene “la convicción” de que “actuaron todos de buena fe y con todas las de la ley”. En ese sentido, manifestó que Lafluf es una persona de su confianza: “Está trabajando con Álvaro en la campaña, hablo seguido con él, amistad podríamos decir”. Además, reivindicó que el exasesor “entregó muchísimo de su vida personal y profesional a la causa”.

Sobre el excanciller Francisco Bustillo sostuvo que “hasta que la Justicia no se exprese, no va a haber ninguna acción de gobierno”, en el sentido de nombrarlo en algún cargo diplomático. “Si la Justicia se expresa mañana como yo creo, sin encontrar responsables, ¿por qué no va a tener un destino profesional?”, afirmó.