La Mesa Política del Frente Amplio (FA) emitió una declaración este lunes a raíz de la decisión del gobierno saliente de firmar el contrato con el Consorcio Aguas de Montevideo para la construcción de una planta potabilizadora en Arazatí, San José, “a pocos días de finalizar el período de gobierno y en el marco de la transición” entre gobiernos.
El órgano de decisión partidario criticó que se haya avanzado en la iniciativa pese a que “ha sido observada y cuestionada por la enorme mayoría de la academia, la sociedad civil y la población local con argumentos muy contundentes” y que de la “multiplicidad de informes que se han generado durante el proceso de discusión y la puesta de manifiesto del proyecto se desprende su inconveniencia como solución a las necesidades de desarrollo de infraestructura para el abastecimiento de agua potable del área metropolitana”.
“La obra planteada no garantiza el abastecimiento de agua potable, al tiempo que genera impactos ambientales, sociales y económicos negativos”, advierte el FA, con énfasis en los cuestionamientos “sobre su constitucionalidad”.
Por otra parte, en línea con lo que ha planteado el futuro ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, la Mesa Política señala que la implementación del proyecto Neptuno afectaría financieramente a OSE, cuyos “ingresos rondan los 550 millones de dólares”, dado que “el costo total estimado del proyecto estaría entre 900 millones y 1.000 millones de dólares, en pagos anuales durante 17,5 años”, a lo que se suman los “compromisos asumidos en préstamos por saneamiento de más de 400 millones de dólares”.
En línea con lo anterior, la Mesa Política del FA considera que “el proyecto deja a la empresa pública sin capacidad para enfrentar futuras inversiones que son fundamentales para el país en los 19 departamentos”, y recuerda que la fuerza política se expresó “en contra del proyecto desde el primer momento”. “Rechazamos el proyecto porque es insostenible desde el punto de vista financiero y social”, expresa.
De cara a la asunción del nuevo gobierno, encabezado por Yamandú Orsi, se destaca que el futuro presidente “ha hecho llegar al presidente Lacalle Pou su posición contraria a través de una carta”, y se señala: “Confiamos plenamente que las compañeras y compañeros designados para integrar el próximo gobierno nacional actuarán con firmeza frente al daño que el contrato genera”.
“Una vez más, rechazamos de manera enfática la firma, que innova en una materia muy sensible por parte de un gobierno que ya está de salida”, finaliza el comunicado.