Luego de reunirse nuevamente con el futuro ministro del Interior, Carlos Negro, el colorado Diego Sanjurjo confirmó este martes que seguirá en la coordinación de Estrategias de Seguridad Integrales y Preventivas de ese ministerio durante el próximo gobierno del Frente Amplio (FA). Hay entre ambos una “visión compartida de lo que es la seguridad pública”, manifestó Sanjurjo. El anuncio no fue sorpresivo, pero no cayó precisamente bien en Vamos Uruguay, el sector del Partido Colorado (PC) liderado por Pedro Bordaberry.
“El doble discurso es lo que me llama la atención”, dijo a _la diaria Tabaré Viera, senador electo por Vamos Uruguay. De esta manera hacía referencia a los cuestionamientos que recibió su sector dentro del PC por la reunión que Bordaberry mantuvo con el presidente electo, Yamandú Orsi, a fines de noviembre.
En aquel entonces, Bordaberry dijo que el propósito del encuentro había sido presentar la agenda de trabajo que tendrá su sector en el Parlamento. De inmediato, Robert Silva, senador electo por Unir para Ganar, el sector liderado por Andrés Ojeda, al que también pertenece Sanjurjo, cuestionó a Bordaberry por “cortarse solo” y sostuvo que “las negociaciones con el gobierno hay que canalizarlas a través del partido”.
Teniendo en cuenta ese antecedente, Viera dijo que “causa mucha extrañeza que ahora un dirigente de ese sector negocie un cargo –ya no un diálogo, un cargo– y después llame para avisar y no pasa nada”. “Esto no fue presentado en la orgánica del PC”, resaltó.
Días atrás, antes de que se confirmara la continuidad de Sanjurjo, Ojeda contó que este lo había llamado para informarle sobre sus reuniones con Negro, y afirmó que la situación “no es comparable con otras reuniones que puedan tener legisladores” con el gobierno electo. Ojeda declaró este martes a El País que se trata de un cargo de confianza, por lo que Sanjurjo “no ocupa un lugar de cuota partidaria colorada”.
Viera señaló que el PC todavía “no ha tratado el tema de la participación en el gobierno”. Si bien puntualizó que “está bien que los sectores tengan la libertad de autorizar a alguien a que a título personal pueda aceptar un cargo”, sostuvo que, al margen de su perfil técnico, Sanjurjo “es un dirigente político de un sector”, que “estuvo y está en el ministerio por el PC” y que “acaba de acordar con un gobierno entrante, de otro partido, sin que el PC haya tomado ninguna decisión”. En las pasadas elecciones nacionales Sanjurjo fue candidato a diputado y senador por la lista 600.
En línea con lo expresado por Viera, Conrado Rodríguez, diputado electo por Vamos Uruguay, dijo a la diaria que la decisión de Sanjurjo “es un tema delicado”, dado que “no se está integrando a la administración [del FA] en un cargo de contralor, sino que, por el contrario, es un cargo netamente de particular confianza”. “Tampoco sabemos si es una decisión de integrar un gobierno a título personal o si hay otro tipo de definición”, añadió.
“Yo particularmente tengo buena relación con Diego Sanjurjo, pero creo que políticamente es un tema delicado”, reiteró Rodríguez, y cuestionó “esa liviandad a la hora de definir con beneplácito integrar cuadros de gobierno del FA”.
Asimismo, Rodríguez dijo que Unir para Crecer maneja “una doble vara”. “Se nos criticó por tener un gesto de saludo hacia el presidente electo y se dijo que eso le correspondía a la orgánica partidaria; y, por otro lado, se define ocupar un cargo de particular confianza en un gobierno del FA y se hace por fuera de la orgánica partidaria”, expresó.
El FA “tendrá que explicar por qué le ratifica la confianza”
Próximo a Silva, y especialmente cercano al diputado Ope Pasquet, Sanjurjo ha sido crítico de las posturas del FA en materia de seguridad. Meses atrás, en una entrevista con radio Sarandí, dijo que el programa de gobierno de la fuerza política que asumirá el gobierno “es increíblemente vago” y “no da ni siquiera para criticarlo”. Durante la campaña electoral dijo a la diaria que las bases programáticas eran “un párrafo de intenciones y deseos”. No obstante, el jerarca del Ministerio del Interior también ha señalado algunos puntos en común con el FA, por ejemplo, la creación de un Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
Para Viera, la decisión política del gobierno de Orsi de “mantener a un asesor con un perfil tan partidario como el de Sanjurjo es todo un mensaje”, en el sentido de que “aparentemente va a haber una continuidad en ese tipo de políticas”. A su entender, a partir de “este tipo de designaciones”, el gobierno entrante “no está planteando volver a lo que fue la política de Bonomi”.
Consultado al respecto, Rodríguez sostuvo que el FA “tendrá que explicar por qué le ratifica la confianza a alguien que estaba en un cargo de particular confianza en el gobierno de la coalición”. “¿Quiere decir que hay cosas del manejo de la seguridad que no estaban tan mal?”, preguntó. A su modo de ver, hay dos opciones: “o demuestra que no tienen cuadros técnicos, o de alguna manera hay una afirmación en cuanto a que la seguridad no estaba tan mal manejada”.