La vicepresidenta de la República, Carolina Cosse, se refirió ayer a la situación en la Franja de Gaza y remarcó que lo que sucede allí es “inaceptable” y que “los grados de sufrimiento, la muerte de inocentes, el hambre [y] el bloqueo a la ayuda humanitaria son cosas inaceptables”.

“Creo que hay que bregar por la paz, por el cese al fuego, porque se desbloquee la ayuda humanitaria, por una solución pacífica y negociada de dos estados”, destacó, y apuntó que lo que dice ya lo señaló la representante de Uruguay en Naciones Unidas Laura Dupuy. “Hay que ir por una solución pacífica, hay que reclamar el cese al fuego, hay que liberar a los rehenes”, sostuvo la vicepresidenta en diálogo con Canal 5.

Además, resaltó que Uruguay debería “atender el desarrollo del proceso de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que se está llevando adelante”. Esta acción la inició Sudáfrica en enero de 2024 al acusar al gobierno de Israel de estar perpetrando un genocidio de la población palestina en Gaza. El 23 de julio el gobierno de Brasil comunicó que se unirá formalmente a esta acción por “conducta genocida” en Gaza.

Consultada al respecto de utilizar el término de genocidio, Cosse explicó que “existe un protocolo, una convención para luchar contra el genocidio, prevención y lucha contra el genocidio”. Señaló que el ámbito de la CIJ se trata de un proceso internacional que es “garantista”, y que por eso Uruguay “tiene que atenderlo”, ya que “no es un proceso estático”, sino que “evoluciona y se investiga”.

Cosse ve con buenos ojos “ensayar alguna medida legislativa” para penas alternativas

Por otro lado, sobre la actividad del Parlamento, donde se desempeña como presidenta de la Asamblea General y de la Cámara de Senadores, Cosse consideró que hay que “poner el centro verdaderamente en las cosas importantes y lograr profundos acuerdos en cuestiones de impacto”. Apuntó que uno de los temas es la malnutrición infantil y las mujeres en prisión con hijos a cargo.

Sobre eso, reflexionó que “cuando alguien comete un delito, la sociedad debe sancionarlo”, lo cual “está muy bien”, pero que “lo que hay que cuidar es que la sanción tenga cierto equilibrio con el delito”. En ese sentido, destacó que es necesario “cuidar” también que esa sanción “no se vuelva en contra de la sociedad”.

Se refirió al informe de la Oficina del Comisionado Parlamentario que profundiza sobre la situación de los niños y niñas cuyas madres están en prisión, e hizo énfasis en los 68 que conviven con sus madres en centros penitenciarios.

“Frente a este estudio tan serio que hizo la Oficina del Comisionado Parlamentario, yo me pregunto e hice la pregunta: ¿no podríamos empezar en un universo pequeño, acotado, para algunos delitos de este universo de 65 mujeres, a ensayar alguna medida legislativa para penas alternativas y su control? Yo creo que lo podemos hacer bien”, afirmó.

Resaltó que hay un “gran equipo” en dicha oficina, y que cree que la sociedad “va a acompañar”, con lo cual se va “a estar empezando”. “¿Vamos a resolver toda la situación de la infancia? No. ¿Vamos a resolver la situación de las cárceles? Tampoco, pero hay que empezar y hay que empezar por algún lugar que duela, que sea difícil pero que sea realizable”, subrayó.