El 11 de octubre de 2019 en Santa Lucía se dio un nuevo paso hacia la definición de un monitoreo piloto del río. En un taller con la comunidad realizado en el Club Social 23 de Marzo de la localidad, se definieron los problemas ambientales a abordar de cara al diseño y la implementación de un plan de monitoreo.
La planificación y la coordinación de la actividad estuvieron a cargo de la Junta de Directores de los Centros Educativos de Santa Lucía, maestras referentes, científicos de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República, activistas de la Asamblea por el Agua del Santa Lucía, un representante de la Red de Municipios de la Intendencia de Canelones, un integrante de extensión universitaria de la Facultad de Ciencias e integrantes del proyecto Río Abierto. El taller contó con la participación del alcalde de Santa Lucía, Raúl Estramil, el secretario de la Red de Municipios, Sergio Barboza, maestras y directoras, estudiantes de liceo y vecinos.
En primer lugar, se conversó sobre la definición de qué es un problema ambiental, y luego se generó un intercambio entre los participantes sobre los problemas en la zona. En una segunda etapa se clasificaron y agruparon los problemas: residuos urbanos, contaminación asociada al modelo productivo, contaminación producida por empresas y fábricas, deforestación.
También se identificaron otros problemas ambientales, como inundaciones, cambio climático, vandalismo de la Picada de Alanís, ruidos molestos.
Por último, se trabajó en subgrupos sobre los temas identificados, con el fin de analizar causas y efectos, y de plantear posibles acciones. Como insumo se utilizó un mapa del municipio y de la cuenca del río para marcar si hay problemas concentrados en un punto específico de la localidad o si, por el contrario, son generalizados.
Como cierre del taller, se presentaron los resultados de cada subgrupo.
Grupo 1: Producción industrial de mediana y gran escala
Causas: Utilización de agroquímicos asociados al modelo productivo, problemas asociados a la falta de control real de las autoridades de los productos utilizados; contaminación asociada a actividades económicas realizadas por tambos, monocultivos, cría de ganado; falta de fiscalización de las distancias establecidas legalmente para la zona buffer.
Puntos de monitoreo: cuenca lechera, zona buffer, areneras.
Efectos: residuos de agroquímicos en frutas y hortalizas, aumento de fósforo y residuos de antibióticos en agua.
Acciones: mayor control y fiscalización de la zona buffer, mayor control y fiscalización del uso de agroquímicos, impulsar y fomentar la agroecología.
Grupo 2: La problemática de los residuos urbanos
Causas: cultural; falta de educación; desinformación; desconocimiento del impacto ambiental a la hora de consumir; falta de compromiso de las industrias y de la población; sistema de gestión de residuos ineficientes y no accesibles; falta de normativa sobre control de residuos; problemas económicos relacionados con la tecnificación; aumento de residuos electrónicos y plástico; reduccion de vida útil de electrodomésticos como estrategia de marketing.
Impacto: en la biodiversidad, en el paisaje, en la salud humana, en el agua y los alimentos.
Posibles soluciones: mejorar en gestión de la clasificación de residuos, generar nueva normativa para regular el uso de plástico, concientizar e informar desde temprana edad.
Grupo 3: Contaminación de fábricas y empresas
Causas: falta de métodos efectivos de purificación de los efluentes, desechos arrojados directamente a la cañada.
Efectos: repercusión directa en la biodiversidad, contaminación sonora, agua y aire, posibles inundaciones.
Acciones: actualización de normas, control del cumplimiento de las normas por parte de fábricas y empresas, promover conciencia ecológica.
Grupo 4: Deforestación del monte ribereño
Causas: actividades asociadas a la tala indiscriminada o a plantación de especies invasivas y no nativas.
Efectos: desaparición de fauna y flora nativa, erosión del suelo, alteración de los cursos de agua.
En el taller también se mencionó la necesidad de implementar certificaciones y cursos con docentes, maestras y profesores para el trabajo con alumnos de escuelas, liceos y escuelas técnicas de la localidad.
El taller de octubre fue la quinta instancia de intercambio en el marco del proyecto Río Abierto en la comunidad de Santa Lucía, de cara a la definición de un monitoreo piloto del río.