El director departamental de Salud de Río Negro, Andrés Montaño, confirmó en una rueda de prensa que la cifra de muertos tras un brote de covid-19 en un establecimiento de larga estadía para personas mayores en Fray Bentos, Río Negro, aumentó a 23.
Montaño dijo que las capacidades del sistema sanitario en este departamento están “totalmente exigidas”, ya que hay médicos y enfermeros que están cursando la enfermedad, al tiempo que el personal de salud está trabajando todo el día para “sacar adelante la situación”. El jerarca definió la situación sanitaria que vive Río Negro como una “guerra”.
Además, cuestionó el comportamiento de la población. “Hay gente enferma que se vacuna igual, y personas que deberían estar en cuarentena o son positivos que van a vacunarse. De esas experiencias estamos teniendo muchas”, sostuvo.
El 14 de marzo, dos adultos comenzaron a tener síntomas en el establecimiento. Se trataba del día previo a la fecha agendada para la vacunación. En ese momento, la doctora responsable del centro, Daura Garaza, pidió test rápidos para las 54 personas que viven en el centro y se detectaron 21 positivos, según explicó a la prensa.
Los adultos mayores con la enfermedad no fueron trasladados al CTI de Fray Bentos por una decisión que tomaron en conjunto Garaza, la dirección del centro y Montaño. El motivo es que el residencial estaba equipado con medicamentos, insumos y personal capacitado para atenderlos, y se entendió que el riesgo del traslado al CTI local o a otros cercanos sería aún mayor que el de atenderlos allí.