Podría decirse que hasta el año pasado Ana Solari (Montevideo, 1957) era una figura de culto en la literatura local. Pero a partir de la aparición de "El señor Fischer", una novela tan ambiciosa como demoledora, es inevitable incluirla en nuestra lista de escritores contemporáneos de peso. Las letras, sin embargo, no agotan los intereses de esta docente, cantautora y viajera incansable.
Para los puristas de la ciencia-ficción fue una especie de traidor. Pero para muchísimos más lectores, Ray Bradbury y su obra significaron una manera entretenida de meterse en temas tan antiguos y preocupantes como la soledad, el crecimiento, el miedo, la esperanza. Ayer se anunció que este estadounidense universal murió el lunes, a pocas semanas de cumplir 92 años.