Estos días son de zafra para las trabajadoras de Conacotex, una cooperativa textil instalada en el Parque Tecnológico Industrial (PTI) del Cerro. Cuando se acerca el comienzo de clases se multiplica la demanda de túnicas para escolares y preescolares, uno de sus principales productos, con el que empezaron esta iniciativa, hace dos años.

“Pertenecíamos a la empresa Everfit”, explicó a la diaria Rosana Ceresa. Cuando esa textil ya estaba en crisis, antes de su cierre, ella y otras siete trabajadoras renunciaron a sus empleos y formaron una cooperativa, en junio de 2017. Pidieron un local en el PTI, donde hoy funcionan más de 70 iniciativas de distintas áreas. “Tuvimos que hacer las paredes, la instalación eléctrica, y como no contábamos con fondos, tuvimos la ayuda de mano de obra solidaria”, dijo. Recibieron el apoyo del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos, y de la Agrupación de Funcionarios de UTE. “Estuvimos trabajando un año y medio sin salario, porque los ingresos que teníamos los dedicábamos a comprar materiales y pagar cuentas. Pero apostamos a esto”, dijo Ceresa.

Comenzaron a vender túnicas en febrero de 2018. Tanto ese año como en 2019, difundieron en grupos de Whatsapp lo que hacen, y la demanda fue mayor de lo que esperaban. “Fue impresionante. Pudimos con los pedidos que ya teníamos, pero acá [en el PTI] se formaron filas y filas de clientes”, añadió Ceresa. Este año Conacotex abrió una página en Facebook y muchos de sus clientes son fieles desde el comienzo. “Los que compraron el año pasado compran nuevamente. La calidad de la túnica es inigualable”, afirmó. Muchos clientes van a buscarlas al PTI, y a los demás les envían el pedido.

“Tenemos que apoyar con nuestra compra el trabajo 100% uruguayo de estos emprendimientos cooperativos”, dice Conacotex en su Facebook. Ceresa agregó: “La diferencia es que las túnicas que comprás en un supermercado son productos importados y las importan grandes superficies, que ya tienen una economía sólida, pero comprando un producto uruguayo generás trabajo”.

Además de las túnicas blancas para escolares de tela Acrocel y de las túnicas “de pintor”, a cuadritos, para preescolares, Conacotex fabrica uniformes y tiene entre sus clientes a algunos sindicatos. También surgieron otros pedidos, con los que diversificaron su producción. “Hacemos pantalones de trabajo, camisas, remeras. Ahora también estamos haciendo cubresofás y almohadones. No nos cerramos a nada”, finalizó la cooperativista.