Los trabajadores de la Federación Ancap (Fancap) ocuparon este jueves por la mañana el edificio central de Ancap, en avenida Libertador y Paysandú, en protesta por la falta de diálogo con las autoridades del ente y el gobierno. Antes incluso de que los trabajadores terminaran el acta de ocupación, desde Ancap se avisó al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y se pidió que interviniera, y tras la comunicación del MTSS al sindicato, a las 10.15 Fancap desocupó las instalaciones. Acordaron un encuentro tripartito que será este viernes, entre Ancap, Fancap y el MTSS.
“Nosotros siempre dijimos que iba a ser una ocupación pacífica, habíamos llegado a un acuerdo de que las autoridades podían pasar. Se tuvo un diálogo en la mañana, pero esta lucha ya escapa a lo que se pueda negociar con las autoridades de Ancap, es con el gobierno. Ahora vamos a esa etapa”, comentó la vicepresidenta de Fancap, Laura Martínez.
El principal reclamo de parte de los sindicatos es por el cierre de la planta de Alcoholes del Uruguay (ALUR) en Pueblo Belén, Salto, que emplea a unos 40 trabajadores. “Estamos en la lucha por el rol social y productivo de Ancap, no queremos que desaparezca Pueblo Belén por las decisiones de la administración. Estamos hablando de una inversión de 180.000 dólares al año y son muchas familias que viven de la única fuente segura de trabajo en el pueblo, por eso queremos mantenerla”, detalló la sindicalista.
Asimismo, están preocupados por “la reforma del mercado de los combustibles que puede llevar al cierre de ALUR Capurro, en Montevideo, con todo lo que eso significa”, puntualizó Martínez y agregó que también reivindican otra plataforma laboral, que exige más ingreso de personal y la reapertura de áreas cerradas por la pandemia.
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Martínez aseguró que “ha habido intercambio con las autoridades” del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), pero “la posición respecto de Belén no cambia. Desde Presidencia propusieron traslados y que puedan ir algunos compañeros de Belén a trabajar a Bella Unión, pero nosotros sabemos que año a año hay una gran dificultad para que surjan esas convocatorias y para que puedan trasladarse de un lugar al otro”.
Martínez aseguró que “como coordinadora de sindicatos vamos a continuar las medidas, vamos a hablar del rol social de Ancap, de los puestos de trabajo que estamos defendiendo. Seguirán adhiriendo con este tipo de medidas los demás sindicatos de la coordinadora, pensamos que puede haber nuevas ocupaciones, todo depende del diálogo y la apertura que se pueda obtener respecto de Pueblo Belén y ALUR”.
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El presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, consideró que la ocupación fue “ilegal”, según escribió en Twitter, por lo que se solicitó la intervención del MTSS. En dialogo con Las cosas en su sitio, de radio Sarandí, el jerarca dijo, en relación al reclamo por la planta en Pueblo Belén, que “no se nos puede pedir ahorrar y que seamos una ONG que está regalando plata para mantener una actividad productiva que no da rentabilidad”.
Posteriormente, Gerardo Rodríguez, presidente de Fancap, dijo a la diaria que el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, propuso un ámbito de negociación que empezará este viernes. Además, destacó que fue una movilización tranquila y sin incidentes, y comentó que a los reclamos que motivaron la movilización se sumó el cierre de los comedores de Ancap, algo que será abordado en la reunión de este viernes.
Ocupación de la sede central de Ancap, convocada por la Federación Fancap.
Foto: Federico Gutiérrez