Posterior al cierre por decreto del sector de “transporte de leche a granel”, en la 10ª ronda de negociación colectiva, y tras no haber llegado a un acuerdo entre las partes el pasado 22 de diciembre, los trabajadores se declararon en conflicto y el martes 26 anunciaron que incrementan medidas. Sobre tal resolución y otros temas, el presidente de Transporte de Leche (Trale), Humberto Ramón, dialogó con la diaria.

El directivo se refirió al conflicto declarado por los funcionarios semanas atrás. Dijo que “las medidas sindicales que los trabajadores vienen implementando desde hace varias semanas pueden afectar el servicio de transporte de leche. Si bien el acatamiento de la medida ha sido acotado, no dejan de generar perjuicios al servicio y costos adicionales a las empresas que realizan la logística y el transporte del producto”.

Agregó que el sector empresarial se ha mostrado siempre abierto al diálogo, contemplando los diversos requerimientos planteados por el Sindicato de Trabajadores de Transporte de Leche (STTL). “Sin embargo, fue imposible llegar a un acuerdo en el Consejo de Salarios y ante esto el sindicato ha anunciado más medidas, generando así una situación cada vez más compleja para el sector”, dijo Ramón. Consultado sobre cuáles serían las principales consecuencias en caso de que continúe el conflicto, respondió: “La continuidad del servicio. Es un servicio que tiene determinadas particularidades de transporte, que se deben cumplir debido a los requerimientos del proceso productivo, sobre todo de clientes internacionales”.

Con respecto a qué hará Trale en caso de que los trabajadores sigan tomando medidas con el paso del tiempo, contestó que están “en vigilancia permanente” y que “no se descarta ninguna acción para poder cumplir a cabalidad con las obligaciones contractuales con el cliente y la cadena logística láctea”. “Se trata de un servicio esencial que debemos cumplir, ya que somos parte de uno de los principales sectores productivos del país y brindamos servicio a uno de los principales exportadores de Uruguay”, concluyó.

En referencia a las condiciones en las que está llegando actualmente la leche a las plantas de las empresas (principalmente a Conaprole), explicó que “está llegando en condiciones, ya que los controles que los choferes no realizan han sido sustituidos por acciones de control paliativas, realizadas por personal logístico o de otros choferes sobre las cisternas. El acatamiento acotado de la medida permite que la incidencia pueda ser tolerada con procesos de emergencia”.

En línea con este tema, el sindicato, por intermedio de uno de sus representantes, advirtió que Trale y Conaprole “flexibilizan los controles” del producto, estando en pleno conflicto. Al respecto, el directivo entiende que “hasta el momento las medidas sindicales no han afectado el servicio de recolección ni la calidad de la leche que llega a las plantas de Conaprole”. “Trale ha tomado medidas paliativas, poniendo a disposición personal calificado y certificado para llevar a cabo los controles que los trabajadores han dejado de realizar”, agregó.

Integrantes del gremio dijeron a la diaria días atrás que cumplen tareas en camiones que son parte de una “flota en condiciones deprimentes”. Sobre esto el empresario aclaró que “más de un 80% de la flota de transporte de leche tiene una antigüedad menor a diez años, y la renovación se da anualmente, incorporando en general las últimas tecnologías disponibles en cuanto a confort”.

Por su parte, acerca de la incorporación de nuevas tecnologías para 2024 y de su importancia, Ramón comentó que “debemos diferenciar lo que es tecnología en materia de transporte de lo que son elementos de control o dispositivos de seguridad del producto (por ejemplo, láser o precintado que previene el terrorismo) que requiere nuestro cliente. Conaprole determina cuál es la tecnología y las mejoras que deben realizarse en los procesos productivos y el servicio para atender las exigencias de los clientes internacionales. Lo que plantee al respecto debemos tratar de atenderlo para preservar nuestras fuentes de trabajo a largo plazo”.

Sobre este punto agregó que en Trale están enfocados en mejorar día a día la flota para brindar el mejor servicio de transporte y logística, así como en garantizar las condiciones de trabajo de los choferes que prestan servicios en las unidades.

Ramón contestó también sobre la interpretación que hace el sindicato de trabajadores, que sostiene que la incorporación de nuevas tecnologías en el futuro fue el punto central que no permitió la firma de un convenio colectivo en los Consejos de Salarios. “Los protocolos de recolección y trazabilidad de un producto tan particular como la leche exigen medidas específicas que en este caso incluyen la utilización obligatoria del kit térmico por camión, así como la incorporación de nuevas tecnologías que pueda requerir el servicio. Cuando hablamos de nuevas tecnologías nos referimos a medidas o dispositivos que permitan garantizar la seguridad y trazabilidad del producto transportado, por ejemplo, el uso de dispositivos para el control de las cisternas, vía láser o precintado, para prevenir atentados contra el producto”, explicó.

Afirmó que “lo que se busca es garantizar que el producto esté salvaguardado en todo momento, sin que esto afecte las tareas que realizan los trabajadores ni las fuentes laborales. Entendemos que es absurdo que este punto sea un obstáculo para poder cerrar el acuerdo, ya que se planteó una cláusula” que estipula “que sólo se busca cuidar el producto e incluso dar más tranquilidad a los choferes, cuidando las exigencias que mencionamos, que no se altere la cantidad, el tipo de tareas a realizar en el proceso ni los puestos de trabajo; por el contrario, le da más respaldo al trabajador”.

Dentro del mismo tema, señaló que “esta propuesta, además, venía acompañada de un crecimiento salarial muy importante. Dimos todo para alcanzar un acuerdo, por lo que lamentamos que no haya sido considerado y valorado por la contraparte. Es imprescindible para el servicio incorporar estos requerimientos, que son exigidos por el cliente, para poder seguir brindando un servicio de calidad y solucionar así problemas que datan de varios años y no afectan en ningún modo las fuentes laborales”.

La postura empresarial ante las medidas del sindicato

Trale emitió este jueves un comunicado en respuesta a las recientes manifestaciones del sindicato y al anuncio de nuevas medidas. “Durante toda la negociación el sector empresarial presentó diversas propuestas de convenio atendiendo las reivindicaciones solicitadas por el STTL. La última propuesta incluía un crecimiento salarial del 7% adicional a las pautas del gobierno, y aumento a 48 horas sindicales para plenarios, acumulables mes a mes (576 horas anuales)”, sostiene.

Explica que “las nuevas medidas sindicales anunciadas (recolección de muestras de leche con trazabilidad manual), sumadas a las que desde hace varias semanas vienen desarrollando, sólo pueden tener como consecuencia poner en riesgo todo el servicio de transporte de leche, provocando un significativo daño al sector y a todos los que forman parte”.

Agrega que “los descuentos legales que conllevan estas medidas se producen en tanto los trabajadores no cumplen con tareas que forman parte del trabajo diario de cada chofer, y están descriptas en el borrador de tareas que ha sido base de todas las negociaciones de Consejos de Salarios desde 2016”.

El comunicado señala que el sector empresarial “ha reconocido las tareas ajenas a la conducción que realiza el chofer de transporte de lácteos desde el reinicio de las negociaciones en Consejos de Salarios (1985). Se han realizado múltiples convenios y se han otorgado partidas adicionales, por lo que resulta incomprensible sostener, como hace el sindicato STTL, que dichas tareas no son reconocidas salarialmente”.

Reitera además que, dados los nuevos protocolos de recolección y trazabilidad de un producto como la leche, “resulta imprescindible el uso obligatorio del kit térmico por camión, así como la incorporación de nuevos dispositivos de control requeridos en la actualidad o en el futuro, por razones de seguridad y trazabilidad, siempre que estos no afecten las tareas actuales y los puestos laborales. En este sentido enfatizamos que se trata de requerimientos específicos del cliente, por lo que su discusión debe finalizar”.

La declaración concluye diciendo: “Entendemos que estos avances deben estimular el cambio y el compromiso entre todas las partes, y no el conflicto. Trale reafirma su compromiso para continuar brindando un servicio de calidad, ofreciendo las garantías debidas a todos los trabajadores involucrados”.