La Federación de Obreros de la Industria de la Carne y Afines (Foica) reunió a su plenario nacional el miércoles para analizar las medidas tomadas días atrás y un futuro plan de acciones a tomar, ante la falta de acuerdo para cerrar un convenio colectivo con los empresarios. Sin embargo, los planes de los dirigentes se vieron modificados cuando en medio del plenario recibieron la llamada del titular de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), Federico Daverede.

Previo a la realización del plenario, la Foica había anunciado el martes que levantaba las medidas para dar espacio a los sindicatos que la integran a poder negociar, sin la presión de estar ejecutando medidas de fuerza.

Al respecto, el presidente de la Foica, Martín Cardozo, explicó a la diaria que en el plenario se analizaron “las medidas adoptadas con los paros sorpresivos, que abarcaron 72 horas”, pero “en el medio del intercambio, llamó el director de Trabajo, previendo que en el sindicato íbamos a diseñar el próximo plan de lucha. Nos planteó asistir a una reunión con el ministro de Trabajo [y Seguridad Social], Mario Arizti, el jueves a las 11.00”.

Sobre ese encuentro, dijo que “todo apunta a tratar de retomar las negociaciones. Eso ayudó a bajar un poco la tensión y el nivel de conflictividad que había, porque los gremios plantearon diferentes medidas, desde paros perlados y asambleas dentro de las plantas hasta la huelga. El llamado de Daverede abrió una esperanza para retomar las negociaciones, que al fin es lo que queremos”.

Cardozo aclaró que en la reunión con el ministro van “a intercambiar para conocer cuáles son sus intenciones y que a la vez sepa de nuestras expectativas”. “Imagino que ya debe haber intercambiado con las cámaras empresariales. Si hay una propuesta la revisaremos y analizaremos, y en base a eso definiremos cómo continuamos adelante”, agregó.

El dirigente explicó que la intención de la Foica es “avanzar con la base de la última propuesta, que fue la que las cámaras empresariales pidieron que hiciéramos el máximo esfuerzo, que iba en línea en una propuesta que planteó el Ejecutivo”.

Agregó que “medidas de acción a corto plazo” no se resolvieron en el plenario pero sí aprobó que “si hay negociación, el sindicato acepta, y si el Ministerio de Trabajo informa que no hay avances, la Foica se reunirá con sus gremios afiliados, y decidirá aplicar las medidas que se entiendan más eficaces”.

Por su parte, este miércoles a las 14.00, representantes de la Foica estaban citados al Ministerio de Trabajo, a los efectos de participar de una reunión que marcaría la votación por parte del Poder Ejecutivo, ante la falta de acuerdo precisamente entre trabajadores y empresarios. A esta reunión, la Foica no se hizo presente. Sobre esto, Cardozo respondió que hizo mención del tema al director Nacional de Trabajo, y que “si la reunión con el ministro Mario Arizti será sobre la base de una propuesta de votación, que decreten”.

“Pero si nos citaron, se da por hecho que la propuesta de votación del Poder Ejecutivo para laudar, en principio, ya no está sobre la mesa”, aseguró.

El directivo manifestó también que en la reunión con Mario Arizti, la Foca presentará una propuesta que hicieron el 8 de noviembre, y que rechazaron las cámaras empresariales. Destacó que “las cámaras empresariales nunca propusieron nada. Lo único que propusieron fue prorrogar el convenio para el año 2026”.

También señaló que, en caso de que las cámaras empresariales estén de acuerdo con negociar, tendrán que responder y presentar una devolución de esa propuesta de ocho puntos. “Si ellos quieren prorrogar, ahí ya no hay negociación. Ahí ya será un conflicto”, advirtió Cardozo.

Puntos centrales de la propuesta de Foica

El sindicato solicita para llegar a un acuerdo que la duración de un nuevo convenio colectivo sea de 24 meses y que la antigüedad sea un 6% diferido -actualmente los trabajadores cobran 4% de una Base de Prestaciones y Contribuciones (BPC), unos 240 pesos por año de antigüedad trabajado-. 

La Federación pide también que la licencia reglamentaria sea en enero de cada año, y que el presentismo tenga un incremento de 2.000 pesos y flexibilidad en llegadas después del horario de ingreso de cuatro horas al mes acumulativa. Sobre la cuota de género o comunidad LGBT, se propone que sea de 20% de ingresos a los centros de trabajo, con prioridad para los sectores productivos.