No hagamos de las gauchadas nuestra forma de actuar en la administración pública. Las burocracias deben respetar ciertas reglas objetivas, la discrecionalidad sólo contribuye a que los más infelices sean los menos privilegiados.
Sostener que la verdad es un instrumento de dominación, y que pretender afirmar que algo es verdadero es una forma de imponer la propia voluntad, me parece casi paranoico y potencialmente nefasto en sus consecuencias.
Estas instancias de la Celac en Honduras y la participación de China y África en la cumbre Celac-UE en octubre tienen un valor geopolítico estratégico.
La inconstitucionalidad del contrato firmado por el expresidente Luis Lacalle Pou nos introduce en un debate profundo no sólo sobre nuestras prioridades en cuanto a acuerdos, sino también sobre a qué tipo de desarrollo apostamos.
Es innegable que el clima se ha vuelto esperanzador; esto es una realidad que las autoridades deben saber aprovechar, recordando que sólo se logra con acciones claras y concretas.
Quienes sostienen que la igualdad es una meta a alcanzar por los individuos que no gozan de ese derecho suelen proyectar en el sistema educativo la responsabilidad de las políticas económicas que reproducen la desigualdad.