En un comunicado publicado en su página web, el laboratorio chino Sinovac advirtió que hay “empresas e individuos que falsificaron y utilizaron ilegalmente documentos de autorización” de dos de sus subsidiarias (Sinovac Beijing y Sinovac Life Science) para vender la vacuna contra la covid-19.
El comunicado especifica que Sinovac Beijing “no participa en la distribución de la vacuna covid-19 CoronaVac fuera de China”; además, “ni Sinovac ni ninguna de sus subsidiarias ha firmado nunca una carta de autorización o documentos similares para ninguna empresa o individuo dentro de China para autorizarlos a distribuir la vacuna Covid-19 CoronaVac fuera de China”. El laboratorio señala que “sin firmar contratos por escrito” con ellos “ninguna entidad o individuo puede sostener que está o está autorizado a participar en la venta, distribución u otras actividades de marketing o promoción relacionadas con cualquiera de los productos de vacunas de Sinovac”.
El sábado 23 de enero el presidente Luis Lacalle Pou anunció, en una conferencia de prensa, que las vacunas contra el coronavirus llegarían a Uruguay a fines de febrero o principios de marzo gracias a un acuerdo alcanzado con los laboratorios Pfizer y Sinovac; al primero se le habría comprado dos millones de dosis, y a Sinovac 1.750.000 vacunas.
Cuatro días después del anuncio, el 27 de enero, el director del instituto Butantan de San Pablo, en Brasil, Dimas Covas, aseguró que aún no existe un acuerdo entre esa institución, que actúa como intermediaria en la compra de vacunas Sinovac para América Latina, y el Ministerio de Salud Pública, por lo tanto, la compra de esas vacunas por parte de Uruguay no está cerrada.
Covas hizo esas declaraciones a la periodista Denise Mota en el programa No toquen nada, de FM del Sol. Según Mota, lo que Covas sí admitió es que hay un “preacuerdo” con el gobierno.
En la última conferencia de prensa, el 27 de febrero, el presidente fue consultado sobre las declaraciones de Covas y dijo que el gobierno hizo un acuerdo con “un representante autorizado por Sinovac”, y aseguró que Álvaro Delgado, el secretario de Presidencia, tiene los documentos “que confirman la representación de la vacuna en esa empresa”, con la que se negoció, así como la “prefactura” para que se paguen las vacunas.
“Nosotros no vamos a ingresar en una batalla comercial por representación. Lo que tenemos escrito es que tal empresa tiene la autorización de tal laboratorio para venderle a Uruguay, explícitamente. Por eso lo de la buena fe entre las partes”, señaló. Luego sostuvo: “El sábado dijimos lo que teníamos negociado, y hoy sostengo exactamente lo mismo”.
Áñez reservó vacunas de empresa no reconocida por Sinovac
El martes, el viceministro de Comercio Exterior de Bolivia, Benjamín Blanco, informó que el gobierno de la ex presidenta de facto Jeanine Áñez reservó 3,5 millones de vacunas para la compra, pero de la empresa intermediaria ZKM Corporation SRL, que no es un representante autorizado de Sinovac, publicó Correo del Sur.
“Nos llama mucho la atención conocer que la exministra de Salud haya reservado 3,5 millones de vacunas a través de la empresa ZKM SRL que está establecida en Bolivia y, al hacer las averiguaciones, hemos constatado que la empresa no tiene ninguna relación con Sinovac en China y tampoco tiene relación con la distribuidora regional que está en Brasil”, declaró Blanco a Bolivia TV.