Teorías nutricionales carentes de evidencia científica, bombardeo de imágenes con cuerpos hegemónicos, mensajes de autoaceptación que se chocan con otros que transmiten exigencias en torno a la estética y la salud cada vez más radicales, y un mercado de dietas apenas regulado. El escenario sobre el que se sostiene en gran medida la forma en la que nos alimentamos y nos vinculamos con nuestro cuerpo está repleto de contradicciones.
No es novedad que el exceso de información genera desinformación. “Un día sale un doctor anunciando que el vino hace bien para el corazón, pero a los tres minutos aparece en nuestra red social favorita el post de un diario advirtiendo sobre el vínculo entre el cáncer y el alcohol. Esta exposición termina afectando nuestra comprensión y hace que quedemos mucho más confundidos”, advierte el nutricionista Miguel Kazarez en su reciente publicación, 100 mitos sobre nutrición (Grijalbo/Penguin Random House, 2022).
Con evidencia científica, memes y un “depende” como respuesta a casi todo, desde 2018 Kazarez divulga información vinculada a la nutrición desde su cuenta de Instagram. El magíster en Nutrición en la Actividad Física y Deporte promueve la comida de verdad mientras advierte sobre los riesgos del consumo de productos ultraprocesados. Apuesta a empoderar a los consumidores. Y por esa línea fue su primera publicación, Saber comer (Grijalbo/Penguin Random House, 2020).
Ahora, con su segundo libro, busca derribar 100 mitos que giran en torno a la nutrición. El recorrido va desde creencias que tienen varios años encima, como la que sostiene “Desayuná como un rey, almorzá como un príncipe y cená como un mendigo”, hasta otras que tomaron fuerza en tiempos de inmediatez y clickbait, como los vinculados con los batidos adelgazantes y los superalimentos.
El antropólogo social Bronisław Malinowski decía que el mito “no es únicamente una narración que se cuente, sino una realidad que se vive”. De cierto modo, lo que plantea Kazarez tiene que ver con esta arista más funcionalista del mito. Las creencias nutricionales existen y toman fuerza porque son compartidas a través de canales masivos –redes sociales, medios de comunicación, publicidad– y son adoptadas por un importante número de personas.
“A mí me funciona”
Al consultar algunos de los mitos que busca derribar Kazarez, como el de la dieta del ayuno intermitente, quizás haya lectores que se sorprendan, porque pueden sentir que a ellos sí les funcionó. En efecto, el nutricionista no se para desde un tajante “esto es mentira”, sino que relativiza. Es que, en el campo de la nutrición, mientras no pongan en peligro la salud, las dietas pueden ser adoptadas como abordajes y no como dogmas.
Distinto es lo que sucede con el universo de la suplementación, donde el efecto placebo puede entrar en juego y, como escribe Kazarez, actúa como un “milagro psicológico”. Suplementarse “por si acaso” es una práctica para nada recomendada por el nutricionista. Si bien algunos suplementos no generan inconvenientes (más que al bolsillo), otros pueden ser nocivos.
Batalla de papers
Los defensores de determinadas dietas o productos suelen ampararse en investigaciones científicas. Pero ¿de qué forma una persona que no está adentrada en el ámbito científico puede cuestionar y desconfiar de esos argumentos? Kazarez explicó a la diaria que la estrategia de quienes promueven mitos nutricionales es muchas veces la del llamado cherry picking, que es la acción de presentar pruebas incompletas y citar sólo casos individuales o datos que parecen confirmar su posición.
El nutricionista dijo que estos discursos por lo general promueven posturas rígidas y tienen una forma muy persuasiva de comunicar. “Nunca usan palabras como ‘depende’, ‘quizás’, ‘hasta el momento es lo que se sabe’, sino que tienden a argumentar todo desde el absolutismo”, y esas son, según Kazarez, alarmas que pueden indicar que sus teorías no sean del todo sólidas.
Vínculo de por vida
En los últimos años, los consumos alimentarios se correspondieron con una ambición cada vez más grande por alcanzar una mejor calidad de vida. Para algunos, estar más saludable se tornó una obsesión. “El problema es que muchas veces confundimos estar sanos con vernos atractivos. Entonces, estar sanos se vuelve una utopía, porque nos ponemos a buscar cualquier estrategia con tal de ver que baja un milímetro la barriga”, reflexiona Kazarez en su libro.
Mientras la adherencia a mitos nutricionales tiene que ver con buscar soluciones mágicas y rápidas afuera, Kazarez propone trabajar en el vínculo con nuestros cuerpos: “Se puede sostener la pérdida de peso con el paso del tiempo. Pero eso implica modificar nuestra conducta, buscar hábitos que nos motiven, que nos fortalezcan, que sean personalizados. Lamentablemente, no es tan sencillo como buscar algo en Google. Requiere conocernos, trabajar nuestras emociones, estimularnos a hacer actividad física y buscar opciones saludables que para nosotros sean viables de reproducir todos los días”.
Este miércoles a las 19.00 Miguel Kazarez presentará su libro 100 mitos sobre nutrición en Nacional Club Social (8 de Octubre 2847) con entrada libre.
Cooperativismo en diálogo
Este miércoles a las 19.00 en El Hormiguero bar (San Salvador 1644 esquina Minas) Kultura empresa cooperativa invita a la última charla del año de sus Encuentros de Ida y Vuelta. “Qué lugar ocupa el cooperativismo en el marco del proyecto de reforma educativa propuesto por el Poder Ejecutivo” es el orden del día. Participan: Movimiento de Educación Popular Pedagogía Freinet y Área de Estudios Cooperativos y Economía Solidaria Sceam Udelar. Habrá un cierre musical a cargo de Enrique Huerta.
Actividad física a beneficio
El Grupo de Estudio Uruguayo de VIH coorganiza con el Área Programática ITS/VIH-Sida del Ministerio de Salud Pública, el Departamento de Actividad Física y Salud de la Secretaría Nacional del Deporte y la Plaza de Deportes 5 “Atilio Narancio” una jornada de actividad física abierta en el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, que se conmemora el 1° de diciembre.
La jornada se realizará este miércoles de 9.00 a 11.00 en 8 de Octubre y 20 de Febrero. Quienes concurran con un alimento no perecedero recibirán una camiseta. Los productos serán acopiados y donados a organizaciones civiles que trabajan junto al Instituto Nacional de Alimentación del Ministerio de Desarrollo Social.
Los docentes de la plaza de deportes, con el apoyo de estudiantes del ISEF y de la Asociación Cristiana de Jóvenes, promoverán actividades como zumba y yoga para concientizar acerca de la importancia de hacer ejercicio.