A las 12.00 del sábado 17 de diciembre, en el estadio Khalifa International Stadium, en Doha, Marruecos y Croacia se enfrentarán para definir quién se queda con el bronce y quién pasa a la historia como el cuarto del Mundial de Qatar 2022.

Con el historial casi en blanco y desempeños recientes que exceden las expectativas previas de los espectadores, las selecciones que cayeron derrotadas en semifinales nos regalarán uno de los encuentros más atractivos de la Copa del Mundo. A pesar de que en su debut compartido en Qatar 2022 el partido fue insulso, ambas selecciones se han desarrollado y han madurado su juego en los otros cinco partidos que disputaron en la presente edición.

Sin diferencias

En el primer duelo del Mundial, Marruecos y Croacia abrieron el grupo F con un sobrio empate a cero.

El otro antecedente fue en 1996, en la ciudad más grande de Marruecos, Casablanca, donde el conjunto africano ofició de local en un amistoso internacional que también terminó empatado, esta vez con goles: fue 2-2 y victoria por penales de Croacia 7-6.

Hinchas croatas previo a el partido ante Argentina en el estadio Lusail.

Hinchas croatas previo a el partido ante Argentina en el estadio Lusail.

Foto: Jewel Samad, AFP

Camino al Mundial

Croacia es el último subcampeón del mundo y repitió su gran desempeño en Rusia 2018, aunque sin clasificar a la final. Llegará a disputar nuevamente siete partidos y se queda hasta el final del calendario pautado en un Mundial por segunda vez consecutiva. A pesar de que su equipo varió considerablemente desde la anterior edición, el fútbol que predican los llevó por buen camino en Qatar 2022.

Zlatko Dalic como entrenador y Mario Mandzukic como asistente técnico de Croacia cuentan con un plantel muy distinto al de Rusia 2018. De todas maneras, la selección europea está integrada por jugadores de la talla de Luka Modric, referente y capitán, Brozovic como pivote organizador y Kovacic, que aporta conducción y tiene la capacidad de romper líneas con sus pases.

Por su parte, Marruecos se clasificó a su segundo Mundial consecutivo tras unas eliminatorias de ensueño en las que ganó seis partidos de fase de grupos y se impuso 5-2 en el global ante República Democrática en la llave de clasificación para Qatar.

En agosto, mientras se diseñaba la lista de convocados para el Mundial, Vahid Halilhodzic, anterior entrenador caracterizado por su rigor profesional, disciplina y dedicación, no quería llevar a Hakim Ziyech, jugador del Chelsea, y Noussair Mazraoui, del Bayern Munich.

Para evitar esto, la Federación lo despidió y contrató a Regragui, campeón de la Champions de África con el Wydad. La intención es clara: ir al Mundial con lo mejor, por sobre la nula preparación.

El equipo tiene varios jugadores en equipos de primer nivel, como los laterales que hubiesen quedado excluidos del Mundial si no cambiaba el DT del conjunto marroquí. Tanto Hakimi como Mazraoui se desprenden en ataque por dentro y por fuera. Con alta tasa de efectividad en el uno contra uno, se destacan por su visión de juego y pegada, además de su marca.

Qatar

Las dos selecciones clasificaron del grupo F a la fase de octavos de final, Marruecos primero y Croacia segundo. Tras dejar en el camino a España por penales en octavos, la selección africana superó por la mínima a Portugal. Finalmente, se bajó de la carrera por la Copa del Mundo cuando Francia lo derrotó 2-0 el miércoles pasado en semifinales. El único representante del continente africano en la instancia final del campeonato del mundo es el conjunto marroquí, protagonista del mejor Mundial de su historia y la de su continente.

Para la selección croata, el camino fue diferente y un poco más agotador. Por penales ante Japón luego de empatar 1-1 en los 120’ de juego, nuevamente desde los once pasos luego de resistir a los incesantes embates brasileros por 120’ minutos más y cayeron 0-3 con Argentina en la semifinal.

Los destacados en la marca marroquí y la creación de juego croata compiten a la par.

La comparativa estadística de ambos equipos puede apreciarse en la siguiente infografía:

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