Hoy se conocerán los resultados del concurso “La casa del futuro”, convocado por la Comisión Técnico Mixta de Salto Grande, al que se presentaron 22 escuelas del departamento de Salto. El concurso busca sensibilizar sobre el uso responsable de la energía eléctrica y los recursos naturales, y proponía que los niños presentaran un proyecto, con su respectiva maqueta, sobre una casa que utilice de forma eficiente la energía. 14 proyectos fueron presentados por escuelas urbanas y ocho por escuelas rurales. Todos los equipos tuvieron que presentar su investigación, la maqueta –que debía ser interactiva–, y defenderla ante el jurado.

La escuela rural 83, de la Colonia Rubio del Instituto Nacional de Colonización, presentó un trabajo en conjunto con las escuelas rurales 36 de Sauce Chico y la 108 de Paso Fialho, que están separadas por entre 40 y 50 kilómetros de distancia. Las tres escuelas tienen únicamente un maestro –que ejerce también como director–, y nuclean en total a 20 niños (diez alumnos de la 83, cinco de la 36 y otros cinco de la 108), que cursan desde educación inicial hasta sexto año. “Nuestra propuesta fue una casa autosustentable, con energía eólica y solar”, explicó la directora y maestra de la escuela 83, Mary Rossi. Las paredes fueron construidas con botellas de vidrio y cubiertas de autos, y la casa cuenta con un sistema de recolección del agua de lluvia, con un biodigestor para la generación de gas, un calentador de agua solar y un horno solar. Además, la casa se construyó sobre una plataforma oscilante, de forma de que pueda seguir el movimiento del sol y asegurar el máximo uso de este como fuente de energía. El concurso, asegura el proyecto, “ha sido el gatillo para iniciar una reflexión, investigación y posible factor de cambio cultural en pos de mejorar la calidad de vida a través de una actitud responsable con el ambiente, que redunda en un ahorro económico”.

La maestra explicó que en este proyecto se pusieron en práctica investigaciones que se habían llevado a cabo en años anteriores, y que en la defensa del proyecto, a los alumnos –que se presentaron con el nombre grupal Pichones Energéticos– les fue “muy bien”. Hace varios años que la escuela 83 se presenta al concurso, que sirve como excusa para “planificar y trabajar los conceptos que se proponen cada año, además de para trabajar en agrupamiento con las otras escuelas”. Con este motivo tienen varias instancias de encuentro entre las tres escuelas, en las que distribuyen las tareas y se van mostrando los avances, contó Rossi a la diaria. La maestra explicó que los niños “adquieren los conceptos de acuerdo a su nivel”, pero aseguró que “todos son capaces de explicar qué hicimos y por qué lo hicimos”.