Aunque el planillado con la cantidad de grupos y horas para que los docentes de secundaria elijan sus cargos del año que viene no está pronto, ya son varios los anuncios del Consejo de Educación Secundaria (CES) sobre reducciones en la cantidad de horas. Por el momento se aprobó reducir al mínimo la cantidad de horas para la dirección de coros y acompañantes pianistas, una reducción de 40 a 20 horas para los profesores orientadores pedagógicos (POP) y un régimen similar para los profesores orientadores en informática y tecnología educativa (POITE), y también se analizan las situaciones de las coordinaciones y de la cantidad de estudiantes por grupo.
Para el representante de la Asociación de Docentes de Enseñanza Secundaria de Montevideo (ADES), Javier Iglesias, esta situación demuestra “el recorte que ya se había anunciado y se trató de desmentir”. “El CES anuncia los recortes de a poco; sabemos que esto todavía no terminó, se va a seguir recortando por distinto lados”, sostuvo.
Según dijo a la diaria el dirigente sindical, “ha costado mucho que el CES se ciña a la Ley de Negociación Colectiva. En las reuniones que se han mantenido, el consejo recoge planteos y brinda escasa información”. Destacó que esa forma de manejarse “genera inquietud en los docentes, porque estamos hablando de gente que se queda sin trabajo; estas propuestas no son negociaciones que se hacen con el sindicato, son líneas que se imponen”.
Iglesias subrayó que no sólo en el CES se presenta esta situación, “también pasa en UTU con la reducción del FPB Formación Profesional Básica, hay recortes en apoyaturas en primaria; en todos los niveles de formación hay recortes de miles de horas”.
Para el consejero electo por los docentes en el CES, Carlos Rivero, las decisiones fueron tomadas “para ajustarse al presupuesto, no porque tengan respaldo pedagógico”. El representante explicó a la diaria que las horas de coro se definían según la cantidad de alumnos, y con este cambio todos los liceos van a tener el mínimo que corresponde a los centros más pequeños. Rivero considera que el coro es “un espacio privilegiado de integración”, pero advirtió que todos los cambios se ajustan a la “adecuación presupuestaria que se impuso”.
La reducción a la mitad de las horas de los POP y la discusión que se da en la misma línea con respecto a los POITE es algo que “preocupa” a Rivero. Según explicó, “la autoridad política lo plantea como organización, el cargo de 40 horas del POP es caro para Secundaria, pero los resultados de tener esa persona dedicada a mejorar el vínculo entre docentes y estudiantes y ser un acompañamiento de los alumnos se ven en las mejoras que demostró el Monitor Educativo en ciclo básico”. Para Rivero, “las reducciones no tienen un tinte pedagógico, sino que son claramente presupuestales”.
También se planteó una reducción de las horas de coordinación para los docentes, algo que “es muy complejo, incluso desde el punto de vista legal, y por eso se está esperando el informe de jurídica del CES para tomar una decisión”, comentó el consejero.
Planillado de secundaria
En los períodos anteriores, a esta altura del año autoridades, docentes y sindicatos comenzaban a trabajar sobre la grilla de horas que se tomarán en 2021. Sin embargo, según comentó Iglesias, hasta ahora no ha habido diálogo sobre el tema.
Sobre esto Rivero puntualizó que la decisión de no incluir a los docentes fue política: “Hicimos un planteo de que en el espacio de coordinación se pudiera pensar el liceo de 2021 y que ese planteo acompañara la propuesta educativa de cada centro, pero este año ese proceso no se va a dar, la autoridad política ya aprobó que el proceso de construcción del planillado lo van a hacer los directores y los inspectores”. Esa decisión del CES responde, según Rivero, “a la concepción del nuevo rol del director que está planteado en la ley de urgente consideración: se lo ve como gestor pedagógico, y entienden que el planillado es parte de sus atribuciones”.
En el CES también se maneja la idea de aumentar el número de estudiantes necesarios para abrir un grupo: pasará de 25 a 35 alumnos. Iglesias opina que “es una bestialidad”, ya que “eso va a generar peores condiciones de estudio y una cantidad de despidos en el cuerpo docente”. Rivero opinó en la misma línea: “Todavía no lo discutimos dentro del CES, pero es una clara intención del Consejo Directivo Central. La realidad es que no hay ningún argumento pedagógico para hacer este cambio, si se hace es sólo para ahorrar, y las consecuencias son importantes. Si volvemos a los salones con muchos alumnos, se van a generar dificultades para atenderlos, menos cercanía y se pondrán en juego los avances hechos hasta ahora”.