La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) aprobó este jueves un nuevo protocolo para las actividades presenciales en los centros educativos durante 2021. El nuevo documento recoge gran parte del protocolo aplicado el año pasado, aunque introduce algunos cambios.
El distanciamiento en primaria seguirá siendo de un metro entre estudiantes, y será también de un metro en el primer año de educación media básica (tanto en liceos como en escuelas técnicas). En el resto de los grados de educación media el distanciamiento variará según el color en el que se encuentre el departamento en el índice de Harvard (que toma el promedio de las tasas de incidencia de covid-19 cada 100.000 habitantes en los siete días previos): si según el Sistema Nacional de Emergencias y el Ministerio de Salud Pública (MSP) se encuentra en colores verde o amarillo la distancia será de un metro, si el departamento está en naranja o rojo, aumentará a un metro y medio.
El protocolo establece que si un departamento cambia de color “el centro educativo deberá articular las adecuaciones necesarias dentro de las 48 horas siguientes”. Para la educación terciaria la distancia mínima seguirá siendo de un metro y medio.
El protocolo introduce una referencia al funcionamiento de burbujas, aunque sin utilizar esa expresión. Señala que en los recreos y en otras instancias de intercambio “se deberá trabajar para que los estudiantes, y en lo posible los docentes, permanezcan en contacto únicamente con el grupo que integran a efectos de mantener circunscripto en el centro educativo los contactos permanentes entre estudiantes y docentes”.
También habilita, tal como habían planteado las asociaciones de colegios privados, que los estudiantes puedan permanecer hasta ocho horas diarias en los centros educativos, lo que en el anterior protocolo estaba limitado a seis.
El documento establece que la asistencia será “obligatoria en todos los niveles educativos” y hace referencia a que las actividades virtuales “serán programadas por las comunidades educativas, atendiendo a todos los estudiantes en un marco de fortalecimiento de la educación combinada”.
El uso de tapabocas para estudiantes
Al igual que en el protocolo de 2020, en el actual documento se establece que el uso de tapabocas no será obligatorio para los estudiantes durante la permanencia en el centro, pero siempre que entre ellos se mantenga una distancia de un metro y medio. Sí será obligatorio “para niños a partir de los 6 años cuando la distancia entre ellos sea de un metro, o existan aglomeraciones (entradas y salidas al centro educativo u otros espacios), así como para los viajes en ómnibus o camionetas de transporte escolar (en estos casos se recomienda el uso desde los 4 años)”.
Señala que no está indicado el uso de mascarillas en menores de tres años, en estudiantes de escuelas especiales y cuando realizan actividad física, mientras que para estudiantes de educación media y terciaria se mantiene la obligatoriedad del tapabocas en cualquier caso.
El protocolo fue elaborado con base en sugerencias y recomendaciones del Grupo Asesor Científico Honorario y el MSP, y fue presentado a la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza de Uruguay este jueves.
Reunión con los sindicatos
El presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la ANEP, Robert Silva, presentó este jueves el protocolo a los trabajadores en una reunión con la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay (CSEU).
Consultado sobre los niveles de presencialidad a los que se espera llegar, Silva detalló algunos datos del año pasado. Según mencionó, se llegó a 33% de las escuelas urbanas con presencialidad plena y a 61% de presencialidad todos los días con horario disminuido en aquellas escuelas que son de tiempo completo. Asimismo puntualizó que si se consideran las escuelas rurales, donde la presencialidad plena fue de 100% en buena parte del año, se puede hablar de 80% de presencialidad plena a nivel país. Silva admitió que la situación es diferente en educación media.
Los sindicatos aseguran que el 1° de marzo comenzarán las clases pero el proceso será gradual hasta llegar al objetivo de la presencialidad y en eso estuvo de acuerdo el presidente del Codicen. Silva opinó que se comenzará mejor el 2021 de lo que se terminó el 2020 y se va a “seguir en un proceso gradual que va a ir aumentando. De hecho, ahora hemos abierto un llamado público para arrendamiento de locales para atender algunas situaciones, estamos trabajando con la Udelar [Universidad de la República] para trasladar liceos a las facultades, venimos trabajando muy profesionalmente y con mucha articulación entre Primaria, Secundaria, UTU y los equipos técnicos para respaldar los equipos” en los centros.
Con respecto a los costos presupuestales que enfrenta la ANEP, Silva recordó el desembolso que llevó hacerse cargo de la alimentación de los escolares durante el verano y aseguró que se buscan formas de equiparar el gasto dentro del mismo presupuesto de la administración. De todas formas, no descartó acudir al Ministerio de Economía y Finanzas para solicitar apoyo financiero.
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