Después de casi dos meses de espera por problemas de agenda de las autoridades, los jerarcas de la Dirección General de Educación Secundaria (DGES) comparecieron ante la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Representantes, a la que fueron citadas por los diputados del Frente Amplio (FA). El objetivo de la reunión fue conocer detalles de la implementación de la reforma educativa en ese subsistema, pero también se sumó la inquietud de la oposición de conocer detalles del cierre de cursos de 2022, que fue cuestionado por docentes, porque la DGES modificó las reglas de pasaje de grado a pocos días.
Si bien la directora general de Secundaria, Jenifer Cherro, planteó que no existen mayores dificultades para la aplicación de los cambios por los que primero, segundo y tercero de liceo pasarán a ser séptimo, octavo y noveno, los diputados del FA no quedaron conformes con las explicaciones de la jerarca. En una conferencia de prensa realizada después de la comparecencia de las autoridades, Nicolás Lorenzo, presidente de la Comisión de Educación y Cultura de Diputados, planteó que desde la oposición están preocupados por el “recorte” presupuestal en la educación que ya han denunciado anteriormente, y también por la “incertidumbre” con la que los docentes viven el proceso de cambio.
Al respecto, Lorenzo señaló que los docentes, que comenzaron a elegir sus horas para el año próximo este lunes, “no saben cuál va a ser su programa, su malla curricular y sus horas de trabajo”. Además, dijo que la incertidumbre es compartida por muchas familias, que no saben “qué cursos van a tener” sus hijos en 2023.
Por su parte, Agustín Mazzini, también integrante de la comisión, sostuvo que la elección de horas será un “caos” y aseguró que la DGES “recortó” cerca de 80 grupos para el año que viene. Si bien las autoridades plantearon que, en caso de haber demanda de estudiantes, se pueden seguir creando grupos en los últimos meses, desde el FA entienden que todos los grupos deben ser proyectados en diciembre. Según explicó Mazzini, mientras se hacen las elecciones de horas y se completan todas las materias, por la vía de los hechos los grupos que se creen en 2023 comenzarán las clases en abril o mayo, lo que afectará el trayecto de los estudiantes.
El diputado colorado e integrante de la comisión, Felipe Schipani, dijo en rueda de prensa que el FA y los sindicatos tienen “el claro propósito” de que no se aplique la transformación educativa, a la que “constantemente le ponen palos en la rueda”, pero el gobierno tiene la determinación de llevar adelante. Por su parte, dijo que, en la comisión, Cherro aseguró que la reforma requerirá de más horas docentes en secundaria que las actuales, por lo que no hay los “recortes” anunciados. En diálogo con la prensa, Cherro fue más allá y aseguró que no habrá docentes que se vayan a quedar sin trabajo el año próximo.
Los legisladores del FA consideraron que varias de sus preguntas quedaron sin responder, en parte porque las autoridades de secundaria tenían límite de horario para la comparecencia y debieron retirarse. “Quedamos con las mismas o más incertidumbres con las que vinimos”, aseguró Mazzini.
Fenapes pide anular acto de elección de horas
Si bien Cherro aseguró que la elección de horas transcurre con normalidad, la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) solicitó que se anulen los actos eleccionarios del lunes y el martes, ya que entienden que ayer la DGES realizó modificaciones que alteraron las reglas de juego en pleno proceso. Según aclara Fenapes en una nota a Cherro publicada en Twitter, hubo un cambio en la consideración de las horas de coordinación respecto de lo anunciado en primera instancia en un instructivo elaborado por Secundaria, ya que ahora no entran dentro del tope de horas de docencia directa que los docentes pueden asumir. En suma, el sindicato solicita que se convoque a un ámbito de negociación colectiva para plantear “todas las denuncias” recibidas sobre el proceso.