Junto a las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Ceibal presentó el viernes Código. Pensamiento computacional, propuesta para el aula, un libro que recoge las experiencias de docentes y estudiantes, quienes reflexionan sobre el pensamiento computacional. Según el investigador y especialista en educación Julian Fraillon, esa competencia implica un “conjunto de habilidades para reconocer aspectos del mundo real que pueden ser modelados como problemas, y para diseñar y evaluar soluciones algorítmicas que puedan ser implementadas computacionalmente”.

En resumen, para el presidente de Ceibal, Leandro Folgar, el libro es el corolario de “un montón de trabajo” hecho a lo largo de varios años, que implica “entender la aplicación de pensamiento computacional en el contexto uruguayo”. En ese sentido, sostuvo que implica la reflexión desde el mundo académico en torno a “cómo se ve” el pensamiento computacional en un contexto como el uruguayo y también entender “cuáles pueden ser sus posibles aplicaciones”. En ese sentido, señaló que busca mostrar “cómo puede ser útil”, en especial en primaria, donde este programa existe para los niños de cuarto a sexto de escuela.

“En 700 centros educativos ya hay 2.000 docentes con más de 60.000 estudiantes que están incorporando actividades de pensamiento computacional. En la práctica hay un valor de estructurar el pensamiento vinculado al pensamiento científico y, a su vez, a las tecnologías digitales con las que contamos en el tiempo de hoy”, expresó, en diálogo con la diaria.

Asimismo, aludió al “poder de cómputo” que está a disposición. En suma, aseguró que hoy cada estudiante en Uruguay tiene ese poder “en sus manos” y lo puede usar “a su favor”. Para que eso suceda tiene que entender “cómo funciona y cómo una computadora puede hacer cosas por ella o por él”, lo que se diferencia de únicamente aprender a usar programas o aplicaciones.

Adentro

En el documento preliminar del Marco Curricular Nacional (MCN), que sienta las bases para la transformación educativa, se dedican unas líneas al pensamiento computacional, una de las diez competencias establecidas para extender a todo el sistema educativo. Según explicó el presidente del Consejo Directivo Central de la ANEP, Robert Silva, en la reforma educativa se hará hincapié en ello por la “efectiva inserción e inclusión” que tiene “en las sociedades del siglo XXI”, puesto que requiere de un conjunto de “aprendizajes, destrezas y habilidades”.

En relación a la ciencia de la computación, el jerarca señaló que es importante por la existencia de “nuevos fenómenos que están presentes en todo el desarrollo de nuestra vida como los algoritmos”. Al respecto, dijo que estos “marcan nuestras preferencias e interactúan con nosotros en redes sociales”, pero también “en otros ámbitos”, por ejemplo, a través de la inteligencia artificial. “Cada vez va a estar influenciando nuestras vidas, por eso se hace necesario desarrollar esta competencia”, apuntó.

En el documento, que fue rechazado por las Asambleas Técnico-Docentes, se señala que al desarrollar el pensamiento computacional la persona identifica “qué aspectos del mundo real” pueden ser “modelados o sistematizados” de manera algorítmica y qué problemas “pueden solucionarse con el uso de lógica computacional y la tecnología”.

Se agrega que, de esa forma, es posible elaborar modelos con el fin de “analizar, diseñar y evaluar” soluciones algorítmicas, “utilizando la lógica de la computación y el potencial de las tecnologías de forma creativa en distintas áreas del conocimiento”. Además, expresa que, como otras competencias, emplea herramientas, a las que integra “a la resolución de problemas y aplica aspectos fundamentales de las ciencias de la computación para, potencialmente, crear tecnología y, también, comprenderla”.

Silva recordó que esta acción venía desarrollándose desde 2017 con un plan piloto en 50 grupos. “Ahora estamos en más de 2.000 grupos y creo que es algo muy bueno, apuesta al futuro trabajando todos juntos por mejorar la educación”, señaló.

Por su parte, Folgar consideró que la inclusión del pensamiento computacional en el MCN significa “el interés” que le da la ANEP a incorporar estas habilidades y competencias, que están asociadas a otras como, por ejemplo, el pensamiento científico o el creativo. “Entienden que en estos ámbitos, en este contexto de pensamiento computacional, hay valor para contribuir a esas competencias que se están pensando y que están generando desde la ANEP. Para nosotros, como agencia de innovación con tecnología al servicio del sistema educativo, que la ANEP lo esté mirando de esta manera es una noticia buena, porque significa para nosotros una ‘misión cumplida’”, expresó Folgar.

A futuro

En la presentación del libro, que se realizó el viernes en el hall de la ANEP, la directora ejecutiva de Políticas Educativas del organismo de enseñanza, Adriana Aristimuño, consideró que si bien conoce “poco” de pensamiento computacional, valoró el aporte del libro, del que dijo que “derrama actualidad y futuro”. “Se funde, se basa en las mejores tradiciones de nuestra educación pública, que fue fuertemente innovadora”, señaló. Esa innovación, aseguró, tiene “mucho que ver” con “lo que estamos intentando hacer en el marco de esta transformación educativa”.

Para Aristimuño, este libro es “fundante” para la “construcción” de esa competencia, pero también aporta a otras competencias “y esa es la gracia”: “¿Quién dice que no puede aportar a la construcción del pensamiento científico? ¿O quién puede decir que no aporta a la comunicación? Son todas competencias que nos planteamos profundizar y desarrollar, que, por supuesto, están presentes de diferentes formas en el sistema educativo, sólo que ahora lo planteamos de forma integrada y como estrategia curricular”. En ese sentido, adelantó que van a “trabajar muchísimo” con el pensamiento computacional.

Por su parte, Silva señaló que la “transformación educativa” que están llevando adelante tiene que “trascender la época” que “nos toca vivir” y por eso “tiene que potenciarse hacia el futuro, con independencia de las circunstancias que en el país acontecen cada cinco años”. “Para que eso se efectivice se necesita de cada uno de los que están en las distintas funciones haciendo lo que hacen; desde los docentes, los dinamizadores, los mentores, hasta los coordinadores, todo ese gran entramado que existe que hace posible que las cosas sucedan”, añadió.

En tanto, el presidente de Ceibal sostuvo a la diaria que hay una “ambición” para poder llegar a dar la mayor cobertura posible mirando hacia el fin del período. “Desde 2020 a hoy hemos cubierto prácticamente a 60% de la población objetivo de cuarto a sexto de escuela, pero todavía tenemos que atender a la educación media, media superior y, a su vez, los niveles más tempranos”, señaló.

En ese marco, dijo que al ser una “estructuración de la mentalidad o del pensamiento”, implica que se pueda trabajar desde las edades más tempranas y durante todo el continuo educativo. “Todo esto con la esperanza de que, en definitiva, los estudiantes tengan más y mejores habilidades para también ejercer ciudadanía en los ámbitos digitales de la manera más libre posible y usar todas estas herramientas que están disponibles para ellos a su favor, en su proyecto de vida”, indicó. 

El libro fue coordinado por Ana Laura Pérez, Emiliano Pereiro, Graciela Oyhenard, Rosario Schunk, Soledad Yerle y Víctor Koleszar. Se puede leer a través de la Biblioteca País, plataforma que cuenta con libros para la población en general. Está disponible en forma gratuita y se puede leer desde cualquier dispositivo.