“La realidad de las escuelas”: “1.100 grupos con más de 30 niñas y niños” decía la convocatoria de la Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de la Educación Primaria (FUM-TEP) a una conferencia de prensa que tuvo lugar este viernes al mediodía.
En ese marco es que Elbia Pereira, secretaria general de la Federación, habló de las “insuficientes” respuestas de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP) ante el reclamo de la FUM-TEP de evitar la superpoblación en los grupos y que todas las maestras recibidas puedan ejercer.
Exclamó que fueron “escuchados” en instancias bipartitas, pero que ninguna propuesta de la Federación ha sido “atendida”. En concreto, Pereira partió de algunos datos de Primaria presentados algunas semanas atrás, en los que se pone de manifiesto, entre otras cuestiones, la cantidad de alumnos asignados por docente. De acuerdo a la secretaria general, las cifras esbozadas por las autoridades “no son del todo exactas”.
“Cuando la DGEIP habla de que hay nueve grupos con más de 36 alumnos, con base en el mismo documento que analiza la Federación, en la realidad son 62 los grupos que tienen más de 36 alumnos”, señaló. Explicó que esos nueve grupos corresponden a Montevideo, y no a todo el país. Asimismo, afirmó que del mismo documento “se desprende claramente que casi 1.200 grupos del país tienen más de 30 alumnos”.
El reclamo se enmarca en la primera reunión bipartita que tuvieron en 2024, efectuada en enero. Pereira explicó que, en esa instancia, la FUM-TEP señaló: “Vamos a tomar esta situación real de la baja de matrícula, que tiene componentes de distintas dimensiones de por qué se da, como oportunidades para los chiquilines, para mejorar sus aprendizajes, para que se mejoren las condiciones de los trabajadores y las trabajadoras, y para aquellas, cientos y cientos, miles de maestras, que, teniendo su título, aún no tienen dónde ejercer su profesión”.
En ese contexto, hicieron “planteos concretos”: Pereira enumeró que, en primer lugar, propusieron la implementación de “duplas pedagógicas” para que atiendan una sola clase, para que en situación de superpoblación en los grupos, los niños y niñas “pudieran tener un maestro cercano a ellos”.
“Sabemos que la infraestructura no está adaptada para decir de un día para otro: ‘Vamos a tener mil cargos más’”, agregó Pereira. Justamente, por ser “conscientes de eso”, dijo que elaboraron tales propuestas, aunque “claramente lo óptimo sería tener grupos que no sean de más de 25” estudiantes.
En segundo lugar, plantearon la necesidad de implementar asistentes técnicos en primera infancia, franja en la que el porcentaje de “grupos numerosos” es casi del 50%, pero tampoco hubo respuesta. “Claramente, nuestras propuestas fueron escuchadas, pero no quiere decir que sean atendidas”, reiteró.
Respuesta y medidas
La única respuesta que la FUM-TEP recibió pero que, aun así, fue catalogada por Pereira como “insuficiente en las necesidades”, es la aplicación de un llamado a tutorías, “es decir, funciones que van relacionadas a los cargos que ya tienen los maestros para atender determinadas circunstancias”. Explicitó que el programa de tutorías inicia ahora, pero termina en agosto.
“La FUM-TEP quiere transmitirle a la sociedad en su conjunto que no se trata de quién tiene la razón, porque el entorno de los chiquilines conoce cuál es la situación cuando lleva a su niño a la escuela: sabe si está en un grupo con determinada cantidad de compañeros para ser atendidos o no, y claro está que es posible entender que al aprender en un contexto de superpoblación, en cierta forma, el niño está con sus derechos vulnerados”, señaló Pereira.
Consultada sobre posibles medidas a tomar en caso de que la situación no se revierta, Pereira señaló que, precisamente, “una de las acciones es comunicar a la población sobre los mismos datos, visiones y datos que no se dieron en otro momento”, o sea, “hacer pública esta situación real”.
Más allá de la conferencia de prensa, la secretaria general contó que la semana que viene la FUM-TEP tendrá su Congreso y la semana siguiente, un plenario, por lo que seguramente llegarán nuevas propuestas a plantear ante la DGEIP, que trascenderán este año y también se enfocarán en aspectos presupuestales.
Necesidad de “políticas integrales”
“Queremos expresar, en principio, la solidaridad de esta Federación con aquellas comunidades donde hay compañeras que están viviendo situaciones de indolencia. Me refiero puntualmente a Rivera, en donde sabemos lo que sucedió con el femicidio de la compañera estudiante de Magisterio, a punto de ser recibida”, manifestó Pereira al inicio de la conferencia de prensa.
A su vez, se refirió a “la triste situación vivida en Río Branco, donde termina siendo agredida una compañera”. Al respecto, señaló que es “una situación que a nosotros nos preocupa enormemente” y que se vincula con la necesidad de que existan “políticas que protejan a las infancias”, ya que “lo que hay no es suficiente”.
Recordó que “en varias oportunidades” la FUM-TEP planteó a la DGEIP colocar cámaras de seguridad, “que es lo que parece que va a suceder ahora en los centros escolares”, pero, aun así, manifestó que “no es suficiente”: “Tienen que hacer políticas integrales que apunten a la protección de las infancias”, finalizó.