El Ministerio del Interior (MI) anunció este lunes en su cuenta de Twitter la renuncia del jefe de Policía de Montevideo, el comisario retirado Erode Ruiz, y el cese en el cargo del jefe de Policía interino de Flores, Walter Porcille.

Según informaron fuentes del MI a la diaria, la renuncia de Ruiz responde a “distintos enfoques sobre la gestión de la Jefatura”, y tomó la decisión este lunes tras reunirse con el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, y el director nacional de Policía, Diego Fernández.

En la mañana de este lunes, el periodista de radio Sarandí Gabriel Pereyra informó que el viernes 23 Ruiz inició contactos con Gustavo Leal, quien fuera director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del último gobierno frenteamplista, por los recientes casos de desalojos a vecinos por parte de organizaciones criminales ocurridos en varios barrios de Montevideo, y señaló que este vínculo habría generado molestia en la cúpula del ministerio, lo que derivó en la renuncia de Ruiz.

Consultado por Subrayado sobre estos trascendidos, Larrañaga respondió que “hay un Ministerio del Interior y hay que cumplir con políticas coordinadas”, y fuentes del MI confirmaron a la diaria que efectivamente el canal de comunicación con el ex jerarca frenteamplista fue uno de los factores que influyeron en la decisión adoptada este lunes.

A su vez, el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, dijo a Subrayado que “la participación del director de Convivencia actual [Santiago González] hubiera sido importante” para evitar estas “diferencias”.

Por otra parte, el cese de Porcille se debe a la realización de una fiesta en la plaza principal de Trinidad el sábado, precisamente frente a la sede de la Policía, en la cual se violaron los protocolos sanitarios, según informó Telemundo.

El cargo de Ruiz será ocupado de forma interina por el comisario Mario D’Elía, actual subjefe de Policía de Montevideo, y Porcille será suplantado provisionalmente por el actual jefe de Policía de Durazno, Richard Marcenal.

Diálogo fluido

Gustavo Leal y Erode Ruiz tienen un diálogo fluido desde que se inició esta gestión de gobierno. Conversaron, por ejemplo, tras el asesinato de la policía Daniela da Silva, el 7 de marzo, en el barrio Nuevo Ellauri. El ex director de Convivencia aportó información para aclarar aquel caso y hasta declaró como testigo en la Fiscalía.

Otro ejemplo: hace diez días el jefe de Policía se comunicó con Leal para informarle de que había muerto Brian Ezequiel Sosa Juncal, uno de los líderes de la banda conocida como Los Chingas. Sosa, que fue asesinado de un tiro en la nuca en el pasaje 318 de Los Palomares, en Casavalle, había amenazado de muerte a Leal en marzo de 2019, tras uno de los operativos de seguridad que el MI llevó a cabo en ese barrio de la capital. Ese día, Ruiz le comunicó que una de las amenazas “había cesado”.

La última conversación entre ambos duró tres horas y fue este viernes 23 en la Jefatura de Policía de Montevideo. Ese día se llevaba a cabo la reunión semanal de los jefes de Policía, pero la terminó coordinando el subjefe, el comisario general Mario D´Elía.

El sábado temprano volvieron a hablar por un caso de desalojo a una vivienda en el barrio 19 de Abril, donde la policía investiga desde hace un mes la usurpación de casas de un complejo habitacional del Plan Juntos. Leal le transmitió que podía ayudar a que los vecinos presentaran la denuncia, y Ruiz estuvo de acuerdo.

Estas últimas comunicaciones de viernes y sábado llegaron a conocimiento de la actual cúpula del MI, que se molestaron por no estar al tanto y porque en estos movimientos no participó el actual director de Convivencia. Larrañaga se comunicó este lunes con el jefe de Policía de Montevideo y le pidió que presentara la renuncia. Explicitó su malestar por los contactos con Leal y le transmitió que ese tipo de vínculos debían ser informados a las autoridades de la cartera.

Ruiz le respondió que el jefe de Policía de Montevideo no podía informar al ministro del Interior de todos los contactos que mantiene; incluso planteó que si Larrañaga debía autorizar cada uno de esos vínculos debería “dedicarse exclusivamente a eso”. Según pudo saber la diaria, el jefe de Policía de Montevideo le enumeró a Larrañaga cuáles fueron los casos anteriores en los que Leal cooperó con investigaciones policiales durante esta administración y también le recordó que era el jerarca que habría ocupado la titularidad del MI si el Frente Amplio hubiera ganado la elección.

Ruiz ostenta uno de los rangos más altos de la Masonería dentro de la Policía; lleva 50 años como funcionario policial y es un jerarca que ha estado identificado con el Partido Nacional.