El Ministerio del Interior convocó a una rueda de prensa en la tarde de este miércoles para informar “novedades” sobre el caso asociado a la fuga de Rocco Morabito. Guillermo Maciel, subsecretario de la cartera, informó que concluyeron 28 sumarios administrativos que comenzaron en junio de 2019, tres días después de la fuga.
Maciel planteó que los sumariados son todos policías, algunos del Instituto Nacional de Rehabilitación, otros de la Jefatura de Policía de Montevideo que estaban cumpliendo tareas en comisión en Cárcel Central, y otros de la Guardia Republicana.
Se concluyó que 14 de los 28 fueron exonerados de responsabilidades en el caso. Siete cometieron faltas “leves”, tres faltas “graves” y cuatro faltas “‘muy graves”, por lo que se resolvió su destitución de la función pública, es decir, se les va a dar de baja. Maciel indicó que estas investigaciones “van a ir a la Oficina Nacional de Servicio Civil para hacer el trámite de destitución por las irregularidades constatadas”.
“Son todos funcionarios policiales de carrera. Cumplían tareas de supervisión y coordinación. Son los que eran encargados, de jerarquías máximas dentro de los controles que había que haber tenido”, señaló. En esa línea, planteó que “no se dieron indicaciones, por ejemplo, a los guardias que vinieron de la Guardia Republicana de qué debían hacer en el piso sexto, donde estaba Morabito”.
“En este momento no estoy en condiciones de dar los nombres de los funcionarios que van a ser sancionados, porque primero tienen que ser notificados. Después de notificados, podrán ustedes tener acceso a los nombres de estos funcionarios”, dijo Maciel a la prensa.
Sobre los hechos que determinaron las faltas que cometieron en cada caso, el subsecretario afirmó que “se van a dar detalladas en las resoluciones, una vez que las personas involucradas estén notificadas”. “Se va a brindar el detalle en cada caso”, aseguró. Las sanciones para los que cometieron faltas leves son de días y en el caso de las faltas graves van de tres a seis meses.
Hasta el momento, “están todos en funciones esperando los resultados”. “Algunos ya cumplieron el tiempo que tiene el sumario y se reintegraron en sus cargos. Ahora, en consecuencia, habrá que aplicar las sanciones correspondientes, afirmó.
El subsecretario del Ministerio del Interior planteó que “el abogado que hizo el sumario administrativo da cuenta expresamente que quedaron por fuera situaciones irregulares que no estaban constatadas en el sumario”, por eso el ministro resolvió firmar cinco resoluciones para investigar cada uno de estos casos. Maciel describió las cinco situaciones irregulares que no fueron investigadas, a las que catalogó como “irregularidades” y “a nuestro juicio muy graves”.
La primera fue “la aparición de una celda del sexto piso que estaba arrancada la reja y había una soga con nudos y con un arnés”. “Eso no fue investigado”, dijo. La segunda fue “la manipulación de las cámaras del sexto piso por parte de Morabito; hay filmaciones en las que se ve a Morabito moviendo cámaras”.
La tercera es que “el fiscal Lackner pide en esa época las grabaciones de Cárcel Central y, en vez de enviarle las filmaciones, se retira el equipo que grababa, por lo cual la cárcel quedó sin cámaras filmando”. “Eso tampoco fue investigado”, señaló. Días antes de la fuga de Morabito, Lackner pidió a la Dirección de Asuntos Internos el registro de las filmaciones y, en lugar de aportar los videos, se retiró el disco duro que los contenía y no se repuso, por lo cual las cámaras filmaban pero no almacenaban el material.
La cuarta situación es la de un funcionario que “no fue investigado y fue denunciado y señalado como el facilitador de herramientas para los presos”. “Ese funcionario no estaba entre los funcionarios sumariados”, subrayó.
Finalmente, la quinta situación que Maciel dijo que iba a ser investigada fue que en una de las visitas conyugales que tuvo el narcotraficante Gerardo Gónzalez Valencia a Cárcel Central llevó un pendrive que pidió entregar a Morabito a través del subdirector operativo de la cárcel, que tomó el pendrive y dio aviso a la directora de la cárcel. “En una de esas visitas, le lleva un pendrive, el cual es incautado por la directora en ese momento de Cárcel Central. Lo incauta y lo eleva al INR, a sus jerarcas de la época, al director y a la subdirectora técnica. Ese pendrive no aparece, no sabemos qué contenido tiene, no sabemos el destino que ha tenido y eso tampoco fue investigado”, manifestó Maciel.
“Todos estos hechos, que son realmente graves, son los que quedaron sin investigar. Por eso ahora abrimos una investigación administrativa por cada uno de estos hechos, que es compleja, que va a llevar tiempo, seguramente no tanto como el sumario de 28 funcionarios, que hubo que hacerlo con todas las garantías del caso, con las vistas correspondientes”.
A nivel penal no hay ningún imputado por la causa que investiga la fuga de Morabito, que está a cargo de la Fiscalía de Delitos Económicos y Complejos de segundo turno. El caso fue investigado por el fiscal Ricardo Lackner desde junio de 2019 y pasó a manos de la fiscal Silvia Porteiro en enero de este año, luego de que Lackner fuera trasladado a la nueva Unidad de Cibercriminalidad de Fiscalía y que Porteiro dejara una de las fiscalías de Flagrancia para ocupar este puesto.
“Todas estas situaciones están siendo investigadas en Fiscalía en paralelo y que podrán tener coincidencias o no”, dijo Maciel, que afirmó que “Lackner había avanzado mucho en eso, incluso había dicho que estaba cerca de terminar la investigación”. Por eso, manifestó: “Tenemos fe en que la Fiscalía lo más pronto posible [avance]”.