En el marco de la crisis hídrica, el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), en coordinación con la Gerencia de Contexto Crítico y Emergencia de OSE, trabaja en la planificación de una propuesta de contingencia para garantizar el suministro de agua apta para consumo de las personas privadas de libertad de las cárceles de la zona metropolitana.

Se van a instalar tanques en siete cárceles, que suman entre todas 9.000 de las casi 15.000 personas que están presas en Uruguay: Unidad 1 Punta de Rieles (cárcel de participación público-privada), Unidad 4 Santiago Vázquez (ex Comcar), Unidad 5 Femenino (cárcel de mujeres de Colón), Unidad 6 Punta de Rieles, Unidad 7 Canelones, Unidad 8 Domingo Arena (cárcel donde se alojan los represores de la dictadura) y Unidad 9 Mujeres con hijos, donde viven 31 niñas y niños.

Según informó el Ministerio del Interior, Luis Mendoza, director del INR, indicó que en los próximos días se instalarán tanques de agua en las siete cárceles que están en Montevideo y Canelones.

“En este momento se compraron 15 tanques que serán colocados en las unidades”, dijo Mendoza. En el Comcar, donde hay casi 5.000 personas, se van a instalar ocho tanques de 2.000 litros cada uno y “OSE diariamente va a suministrar agua potable a esos tanques, que van a estar ubicados en forma estratégica para darles agua tanto para la confección de alimentos como para beber a las personas privadas de libertad”. El agua para el aseo y la limpieza seguirá siendo el agua que sale por la cañería.