En 2023 hubo un homicidio cada 23 horas. Fueron 382 casos, uno menos que el año anterior, según el Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior. Esto representa una baja de 0,3% respecto de 2022, que fue el año que registró la mayor cantidad de homicidios de esta gestión de gobierno, con un aumento de 25,2% respecto de 2021, cuando hubo 300 casos. En 2020 hubo 334 homicidios y en 2019 fueron 393. Si se compara 2023 con 2020, el aumento es de 14%, y en relación con 2019, último año de gestión del Frente Amplio, se registra un descenso de 3%.

Por mes

Enero fue el mes en el que hubo más homicidios, con 40 casos, seguido por noviembre, con 37, junio, con 36 homicidios, y diciembre, con 35.

Por departamento

210 de los 382 (55%) casos fueron en Montevideo –seis casos menos que el año anterior–. En el resto del país hubo 172 homicidios (45%). Este tipo de relación se mantiene respecto de años anteriores.

Los homicidios aumentaron en ocho departamentos: Colonia, Durazno, Maldonado, Paysandú, Río Negro, Rocha, Soriano y Tacuarembó. También en cárceles: pasaron de 13 a 19 casos. En San José hubo nueve casos, la misma cantidad que el año anterior. En los restantes departamentos los homicidios bajaron. No se registraron homicidios en Flores ni en Florida. En ambos departamentos no se registraron homicidios tampoco en 2021, pero sí en 2022, cuando hubo dos casos en Flores y cuatro en Florida.

En lo que respecta a la tasa de homicidios, que se calcula a partir del promedio de 2022 y 2023, Montevideo es el departamento con la tasa más alta del país (15,4). Superó a Rivera, que desde hace años era el departamento que tenía mayor tasa de homicidios y donde en 2023 se registraron 15,1 casos cada 100.000 habitantes. Ambos departamentos presentan tasas “muy altas”. Rocha (12,1), Durazno (11), Artigas (10,2) y Lavalleja (9,4) son los departamentos que tienen tasas “altas” de homicidios. Los departamentos que tienen tasas “medias” de homicidios son Canelones (8), Maldonado (7,7), San José (7,5) y Tacuarembó (5,4). Tienen tasas “bajas” de homicidios Paysandú (4,6), Salto (4,5), Colonia (4,5), Flores (3,8), Soriano (3,6), Cerro Largo (3,3), Treinta y Tres (3), Florida (2,9) y Río Negro (1,7).

La mayoría de los homicidios en Montevideo fueron en el noreste y el noroeste

Al igual que en años anteriores, la zona 3, que comprende el noreste montevideano, concentró la mayor cantidad de homicidios: 114 de 216 casos (53%). La Seccional 17ª (Casavalle, Marconi, Las Acacias, Piedras Blancas y Manga, al noreste) tiene la mayor cantidad de homicidios: 35 casos (16,7%). Allí la tasa de homicidios es de 37,3 cada 100.000 habitantes, lo que supera a todos los países de América Latina. La Seccional 18ª (Punta de Rieles, Villa García, Piedras Blancas y Manga, al sureste) tiene una tasa de 35,1 homicidios cada 100.000 habitantes. En esta jurisdicción hubo 24 casos (11,4% del total de homicidios de Montevideo), siendo esta la tercera comisaría con mayor cantidad de homicidios.

En medio, está la Seccional 24ª, de la zona 4, que comprende el Cerro, Santa Catalina y La Paloma, donde hubo 28 homicidios (13,3% del total). En esta jurisdicción la tasa de homicidios es de 32,5 cada 100.000 habitantes. La zona 4 es la segunda zona que concentra mayor cantidad de homicidios. Tanto en la zona 3 como en la zona 4 aumentaron las tasas de homicidios respecto del año anterior.

En la zona 2, que es el sureste montevideano, hay tasas medias de homicidios, mientras que en la zona 1, que comprende de Ciudad Vieja al Prado, están las tasas más bajas.

En la Seccional 10ª (Pocitos, Punta Carretas, Villa Dolores) se ha registrado la tasa más baja de homicidios de Montevideo, con 0,5 casos cada 100.000 habitantes.

La mayoría de los homicidios fueron de sábado a lunes

La mayoría de los homicidios en 2023 fueron los domingos (18%) y los lunes (17%), días a los que siguen los sábados (16%). A diferencia de años anteriores, el día en que hubo menos homicidios fue el viernes (10%); 14% de los homicidios fueron los martes y tanto miércoles como jueves se registraron 12% de los casos cada día.

La mayoría de los homicidios fueron en la tarde noche

40% de los homicidios se cometieron en la tarde noche: desde las 14.00 a las 21.59; 36% fueron desde las 22.00 a las 5.59 y 24% fueron desde las 6.00 a las 13.59.

La mayoría de los homicidios fueron en la vía pública

60% de los homicidios ocurridos en 2022 fueron en la vía pública (230 casos), mientras que 25% ocurrieron en residencias (94), 5% en cárceles (19), 2% en locales comerciales (6), 1% en bares, cantinas y clubes nocturnos (4) y 8% de los casos en otros lugares o no hay datos al respecto (29 casos).

Las armas de fuego siguen siendo las más usadas para matar

Al igual que en los años anteriores, la mayoría de los homicidios se cometieron con armas de fuego (63%). Hubo diez homicidios más que el año anterior con armas de fuego (3% más). Después de 2019, año en que hubo 246 asesinatos en los que se usaron armas de fuego, 2023 fue el año con mayor cantidad de casos en los que se dio muerte con este tipo de arma (241 casos). El uso de armas de fuego para matar es mucho más elevado en Montevideo que en el resto del país: 75% a 45%, respectivamente.

43% de los homicidios no fueron aclarados

Desde 2017 el esclarecimiento de homicidios está por debajo del 60%: 163 de los 382 homicidios que hubo en 2023 no se aclararon (43%) y sí lo hicieron los restantes 219 (57%). Aumentó un 2% el nivel de esclarecimiento de homicidios respecto del año anterior, cuando se aclararon nueve casos menos.

Sólo 6% de los homicidios fueron cometidos por adolescentes

Al igual que en 2022, 94% de los homicidios fueron cometidos por personas adultas, mientras que 22 de 382 homicidios fueron cometidos por adolescentes (6%).

En el caso de los homicidios aclarados, es decir, en 57% de los homicidios que se registraron, se detectó la presencia de adolescentes en 10% de los casos.

La participación de adolescentes en homicidios está por debajo del 6% desde 2017.

15% de las víctimas fueron mujeres

56 de las 382 víctimas de homicidio fueron mujeres (15%). Es el mayor registro de casos de esta gestión de gobierno, sólo superado por 2018, año en que hubo 57 homicidios contra mujeres y el pico máximo de homicidios de la historia. Los femicidios que tienen como agresores a las parejas o exparejas representaron el 4% del total de homicidios.

Por primera vez desde que se registran datos en el Ministerio del Interior, las mujeres fueron mayoritariamente asesinadas por su pareja o expareja, que suelen ser los principales agresores. 29% de las mujeres fueron asesinadas por su pareja o expareja (16 casos); en 17 casos la persona responsable del homicidio fue un amigo o un conocido (30%); en once casos se desconoce el vínculo (20%) y en siete casos no se estableció relación entre la víctima y el agresor (12%); por último, en cinco casos el agresor fue un familiar (9%).

La mayoría de las víctimas tenían entre 18 y 28 años

En 2022 mataron a 138 personas que tenían entre 18 y 28 años (36%), la misma cifra que el año anterior, siendo esta la franja etaria que recibe mayor violencia letal.

La siguiente franja etaria en la que se concentraron los homicidios fue en personas de 29 a 38 años (119 casos: 31,2%) y de 39 a 48 años (61 casos: 16%). Ambas franjas tuvieron un aumento respecto del año anterior.

6% de las víctimas tenían entre 48 y 58 años (23 casos) y en 4,2% tenían entre 59 y 68 años (16 casos). Hubo siete víctimas que tenían entre 69 y 78 años (1,8%) y tres tenían 79 años o más (0,8%).

En lo que respecta a niñas, niños y adolescentes, hubo una víctima menor de tres años y otra que tenía entre seis y 12 años. Fueron asesinados 13 adolescentes, uno más que el año anterior. No se registraron homicidios en niñas o niños de cuatro a cinco años, al igual que en 2022.

47% de las víctimas no tenían antecedentes penales

47% de las víctimas de homicidio en 2022 no tenían antecedentes penales (181 personas), mientras que en 201 casos (53%) sí los tenían.

En 2022, por única vez, el Ministerio del Interior incluyó el dato sobre las indagatorias de las víctimas. Una indagatoria se configura en el sistema cuando una persona es denunciada por un delito o cuando se la considera “sospechosa” de un delito. En 2023 no figura este dato.

Las personas asesinadas en rapiñas y copamientos casi se duplicaron

El 50% de los homicidios fueron por conflictos criminales o “ajuste de cuentas”, según determina el Ministerio del Interior. 191 casos fueron registrados en esta categoría. 19% de los homicidios fueron en altercados espontáneos no domésticos (73 casos), cifra que aumentó respecto del año anterior. 8% fueron en situaciones de violencia intrafamiliar y derivados (31 casos), registro que se redujo si se compara con 2022. En 49 casos no se conoce el motivo (13%) y 12 fueron por “otros motivos” (3%).

25 personas fueron asesinadas en rapiñas y copamientos (7%). Fueron diez homicidios más que el año anterior en este tipo de hechos. En 2022, 4% de los homicidios fueron en rapiñas y copamientos.

Seis personas fueron asesinadas en copamientos, cinco en rapiñas a comercios y otras cinco en rapiñas a automovilistas. Tres víctimas fueron motociclistas, dos fueron repartidores y otras dos fueron personas que circulaban por la calle. Hubo un caso de rapiña que se dio en “otra situación”.