El embajador de Nicaragua en la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Alvarado, atacó al gobierno uruguayo durante una sesión virtual del Consejo Permanente este miércoles. En la reunión, el Consejo recibió un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la situación de Nicaragua.

En su alocución, el diplomático nicaragüense se dirigió al representante uruguayo, Washington Abdala, y le espetó: “En cuanto al distinguido embajador del Uruguay, nos preocupa seriamente lo que la dictadura uruguaya está haciendo con su presidente a la cabeza”.

“Sigue impulsando leyes para imponerles un bozal a los medios de comunicación; en el último año se registraron 49 casos de amenazas a la libertad de prensa de periodistas del Uruguay”, apuntó el representante nicaragüense, citando un informe del Centro de Acceso a la Información Pública.

Además, dijo que “en julio se aprobó la ley de urgente consideración, llamada LUC, que contenía disposiciones imprecisas que restringían la libertad de expresión, de reunión y prohibía las manifestaciones y las protestas sociales”. “Así que, ¿qué consejos nos viene a dar, señor embajador?”, preguntó Alvarado.

En respuesta, Abdala manifestó su enfático rechazo a “la descalificación hacia el Uruguay como una dictadura”. “Creo que ingresa en un despropósito gigantesco, creo que desconoce absolutamente lo que es la legitimidad de origen y de ejercicio del gobierno de la República Oriental del Uruguay, del doctor Luis Lacalle Pou, quien fuera electo democráticamente, y que gobierno y oposición, a pesar de tener matices, siguen conviviendo de manera pacífica y democrática”, continuó.

“No le permito al embajador de Nicaragua una descalificación de esa naturaleza”, dijo Abdala, que después le aseguró que “si llega a decir otra infamia más de esa naturaleza” actuará “en consecuencia”. “Es la última vez que le permito que diga un disparate de ese tipo”, remató.

“No tiene autoridad”

A nivel político hubo algunas reacciones al comentario de Alvarado. El diputado del Partido Nacional Juan Martín Rodríguez, integrante de la Comisión de Asuntos Internacionales de la cámara baja, dijo a la diaria que lo expresado por Alvarado es “inaudito” y “disparatado” No obstante, opinó que tan sólo fue “un intento de agravio a nuestro país”, ya que “el régimen encabezado por [Daniel] Ortega y [Rosario] Murillo si de algo no puede hablar es de defensa de derechos humanos y el verdadero significado de la palabra democracia”. “La actitud que asumió el señor Alvarado con respecto a Uruguay es la típica estrategia que tienen los regímenes, cuando se ven cercados, de salir a ensuciar a diestra y siniestra a todos aquellos que los condenan por las arbitrariedades y las atrocidades que cometen”, apuntó el diputado.

Desde el Frente Amplio (FA), el senador Enrique Rubio, integrante de la Comisión de Asuntos Internacionales de la cámara alta, dijo a la diaria que lo dicho por Alvarado fue “un absoluto despropósito”. “Nicaragua, a mi juicio, está ocupando el último peldaño junto con Colombia y con algunos otros países de América Latina en materia de cuestiones democráticas. No tiene autoridad para emitir juicios sobre nuestro país”, apuntó el senador del FA. No obstante, dijo que “hay una concentración en el tema de Nicaragua”, es decir, que en reiteradas ocasiones desde Uruguay se habla de las violaciones a los derechos humanos en aquel país y no sobre otros casos. “Está bien que se haga en relación a Nicaragua”, dijo, aunque afirmó que no es “la única situación sobre la cual hay que pronunciarse”.

Por su parte, Sebastián Hagobian, integrante de la Comisión de Asuntos y Relaciones Internacionales del FA, dijo a la diaria que las declaraciones de Alvarado “sin duda no son muy acertadas”, porque “Uruguay es una democracia plena, es la primera en América Latina y está entre las primeras 20 a nivel mundial”. No obstante, consideró que la política exterior del gobierno uruguayo “tiene un alineamiento hacia la visión de Estados Unidos” y “al accionar de los gobiernos de derecha”. Además, también percibe “un juego electoral” en el gobierno. “Juega para su tribuna electoral condenando a determinados gobiernos únicamente y no haciendo prácticamente mención a condenas en situaciones muy similares de violencia, en las que hay muertos y una represión desmedida, como es el caso de Colombia o como fue el caso también de la represión en Chile. Ahí el gobierno de [Luis] Lacalle Pou no marca ninguna firmeza, mientras que con Cuba, Nicaragua y Venezuela lo hace porque sigue de campaña electoral”, concluyó.

Desde la cancillería dijeron a la diaria que el tema ocurrido en la sesión de la OEA está a estudio, pero no adelantaron posibles acciones. Días atrás, el Ministerio de Relaciones Exteriores emitió un comunicado solicitando al gobierno de Daniel Ortega la liberación de los dirigentes opositores presos. A su vez, este martes la Cámara de Senadores emitió un mensaje votado por todos los partidos políticos, en el que manifestó su “condena” y “rechazo” a los hechos en Nicaragua.