El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, habló en una rueda de prensa este jueves sobre diversos temas de coyuntura, entre ellos los ceses en la cúpula policial registrados esta semana y el contenido de los chats que vinculan a su excustodio Alejandro Astesiano con el seguimiento al presidente del PIT-CNT y pedidos de intervención de teléfonos de estudiantes y docentes del liceo 41.

Primero se refirió a los relevos en el Ministerio del Interior (MI), y puntualmente sobre el del subdirector ejecutivo de la Policía, Jorge Berriel, dijo que, aunque ya estaba previsto, las conversaciones con Astesiano fueron “un elemento más”. Entre otros contactos que mantuvieron, Astesiano le pidió a Berriel que averiguara a dónde iba a viajar Lorena Ponce de León, la expareja del presidente.

“Vamos a la acción que, me imagino, es la que interesa y la que importa: la política exitosa o no en seguridad. Ayer, off the record, me preguntaron algunos colegas de ustedes si yo estaba conforme, y contesto lo que vengo contestando hace uno o dos años: conformes no estamos, porque siempre creemos que se puede mejorar”, sostuvo el mandatario, que en la misma línea que lo planteado por el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, aseguró que el cambio en los mandos estaba definido con anterioridad.

“Se debe a una conversación que mantuve con el ministro ya hace un tiempo, o sea que no es de coyuntura”, afirmó, aunque reconoció que “hay casos distintos en los cambios en la jefatura”. Por ejemplo, dijo respecto del director nacional de la Policía, Diego Fernández, que “en lo personal” no tiene “ninguna crítica ni queja directa; simplemente es un cambio para dar un salto cualitativo, para mejorar y para un refresh en la gestión”. Asimismo, adelantó que “puede haber algún otro cambio” en esa secretaría.

El presidente también dijo que se tomó la decisión de relevar al integrante de la custodia de Presidencia Marcelo Fránquez al conocer por la prensa su intención de intervenir los celulares de alumnos y docentes del liceo 41. “Nosotros no vamos cubriendo y protegiendo. No andamos diciendo que es bullying, que si es de un partido puede cometer corrupción y de otro partido no. Si se equivoca, sea del partido que sea, está la Justicia”, afirmó.

Lacalle Pou sobre la divulgación de los chats

Lacalle Pou habló largamente con los medios de prensa sobre la publicación periodística de los chats que integran la carpeta judicial de Astesiano y manifestó su hipótesis de que hay un trasfondo político de parte de los medios que los han difundido: “Lo que es claro es que las conversaciones, los chats, los mensajes desde el 28 o 29 de setiembre son públicos. No, mentira: alguien se los dio a uno o dos medios de prensa que ustedes los conocen, son colegas de ustedes. Esos dos medios de prensa claramente tienen una vinculación política, claramente”, afirmó.

“Esos medios de prensa, diariamente o semanalmente, según la realidad política, van filtrando información. Ponen la música y todos los que estamos acá, ustedes y nosotros, bailamos al ritmo de la música que ponen dos medios de prensa”, acusó el mandatario, aunque luego agregó que no adjudica “intenciones”.

Ante la afirmación de uno de los periodistas presentes de que la información difundida es relevante, por ejemplo, la que refiere al seguimiento a Abdala, Lacalle le respondió: “¿Eso en qué me involucra a mí? ¿Cuál es la pregunta hacia el gobierno, cuando hay una persona que está en prisión preventiva y sometida a la Justicia? ¿Cuál es el nexo?”. Y continuó con las preguntas: “¿Mi error cuál es? Haber elegido a la persona equivocada. Lo dije el primer día, lo repito por si alguno todavía no se desayunó. No voy a seguir contestando sobre cosas que están en la Justicia”, apuntó.

Cuando se le mencionó que Abdala pidió la condena del seguimiento que hizo Astesiano con cámaras de videovigilancia a su trayecto previo al siniestro de tránsito en febrero del año pasado, Lacalle espetó: “¿Condena de qué? ¿De qué hecho? ¿Porque una persona pidió determinada cosa que está siendo juzgada yo tengo que condenar qué cosa? ¿Un seguimiento que existió o no existió?”.

Visiblemente molesto ante la seguidilla de preguntas sobre Astesiano, Lacalle dijo a los medios presentes: “Aprovechen hoy, sáquense todas las ganas de preguntar todo lo que quieran de esto, porque la verdad, los otros van a seguir poniendo la música, pero yo ya estoy con las piernas cansadas de bailar”.

“Están hablando con el presidente de la República, no con el representante de nadie”, lanzó luego en respuesta a uno de los periodistas. Sobre la participación de su secretario personal, Nicolás Martínez, en las conversaciones con Astesiano sobre el accidente de Abdala, señaló que lo conoce “hace 17, 18 años” y “no es la primera vez que le tiran un balde de bosta; ya lo hicieron en la campaña de 2014 y yo lo respaldo porque, primero, es una persona de bien. Segundo, es un funcionario público de primer nivel y obviamente que si lo tengo hace tantos años al lado, casi como un hermano, es porque confío plenamente en él”.

Ante la consulta sobre el contenido del interrogatorio que le hizo la fiscal Gabriela Fossati, no quiso entrar en detalles y se limitó a responder que “está en Fiscalía” y que se habló “de todo un poco”. El presidente fue insistente con los periodistas presentes en que siguieran preguntando por Astesiano: “Ahora después hablamos de lo importante”, ironizó.

Consultado sobre si este es el caso más grave que ha afrontado el gobierno, contestó: “No, no, estás loco. Este es un tema de afectación personal. Lo más grave para el país, y por ende para el gobierno y para el presidente, fue la pandemia. Yo entiendo que esto da jugo, pero lo importante para la gente -la enfermedad, la paralización económica, la muerte… Eso es, esto no”.