El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, hizo este viernes un balance de su discurso ante el Parlamento y analizó algunos de los momentos más críticos de su gobierno, que definió como “las piedras en el camino”, incluido el caso de su exjefe de seguridad Alejandro Astesiano. A pesar de las críticas y las bajas en las encuestas, Lacalle Pou entiende que está bien rodeado por la población y eso es lo que lo sostiene: “A mí es lo que me ha llenado de energía, la gente me ha dado contención, soporte, afecto, aliento”, aseguró el mandatario.

En entrevista con Primera mañana, en la radio El Espectador, Lacalle Pou aseguró que ha “reconocido los errores”, en particular con relación a Astesiano, y aseguró que los últimos meses en que fue investigado hasta llegar a un acuerdo abreviado fue un “momento difícil”.

Afirmó que no quiere “entrar en la polémica” sobre las críticas de la oposición, encabezada por el Frente Amplio (FA), porque siente que se ha “elevado el nivel de fuego”: “Yo si hay algo que no tengo que hacer es colaborar con eso, por mi posición institucional; ganas no me faltan, pero en este cargo lo que uno tiene que hacer es tener paciencia, prudencia y equilibrio”, sostuvo.

“Entiendo la voracidad; el FA extraña el poder, el FA nunca pensó que iba a haber una alternancia en el poder, y es lo más saludable en el gobierno, hay que respetarla. Todo eso ha hecho que eleven el poder de fuego y hayan hecho acusaciones fuera de tono, pero cada uno actúa como le parece y por suerte acá nos cruzamos en todas las esquinas, sabemos quién es cada uno y la vida sigue”, dijo, y agregó: “Lo bueno de estos momentos es saber quién es cada uno y hasta dónde está dispuesto a ir en estos temas”.

Lacalle Pou dijo que no esgrimirá una defensa a su favor y se limitó a “relatar los hechos”. Comentó que reconoció el error de haber contratado a Astesiano, pero destacó que lo hayan podido detener en la residencia presidencial y retomó las palabras de la fiscal del caso, Gabriela Fossati, quien había dicho que en la investigación la institución que más colaboró fue Presidencia.

De todas formas, opinó que no es sorpresa que haya “dirigentes políticos y algunos medios partidarios” que hayan logrado instalar “la idea” de corrupción en el entorno de la Torre Ejecutiva.

Las críticas de su discurso en el Parlamento

Varios dirigentes de la oposición, e incluso algunos integrantes de la coalición de gobierno, tuvieron algunas críticas sobre el discurso que brindó Lacalle Pou. En particular desde el FA se señaló que el mandatario presentó “el país de las maravillas”, obviando algunas de las cifras menos victoriosas de su gobierno. Lacalle Pou dijo esto no fue así, en tanto comenzó su discurso marcando los debes, como la pobreza infantil, la vivienda y la seguridad, y retomó la promesa de que se recuperará el nivel salarial previo a la pandemia en el sector privado.

También fue consultado sobre su anuncio en relación a la baja impositiva, y la crítica de que no fue suficiente, si se tiene en cuenta que la inversión será de 0,25% del producto Interno bruto del país. Lacalle Pou considera importante recordar que durante años se cobró impuestos y no hubo un “alivio tributario”, y que se está haciendo esta reducción, que es “un perro verde, va a contramano de lo que se está haciendo en el mundo”.

Aseguró que este alivio lo sentirán los asalariados de las franjas más bajas que pagan IRPF y se decidió utilizar una herramienta que se pudiera sectorizar para apuntar específicamente a ellas: “Primero, porque no reciben ninguna asistencia del Estado y son los que les complica mucho llegar a fin de mes”.

El mandatario sostuvo la idea de que esas familias a las que se les va a devolver “1.000, 2.000, 3.000 pesos los va a gastar en el barrio, en el súper, va a arreglar una ventana, va a pagar unas cuentas, va a poder estar más flojo, y eso permea en el barrio, ese no va a ir a comprar un pasaje a Miami o un auto cero km, es dinero que el Estado le deja en el bolsillo a un ciudadano y que enseguida lo hace girar y genera dinamismo económico”.

La salud de la coalición

Lacalle dijo que la coalición es “trabajosa pero saludable”, retomando algunas de las frases con las que los dirigentes políticos la han calificado. Destacó que no había necesidad en su discurso de hacer referencia explícita a los partidos que la integran, en tanto al mencionar los objetivos alcanzados por organismos liderados por socios de la coalición alcanza, y puso como ejemplo la Administración Nacional de Educación Pública, Antel y los ministerios de Trabajo, Vivienda y Ganadería, organismos que no están en manos del Partido Nacional.

Con respecto a la crítica que le hizo el líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, sobre la forma de dirigir la coalición muy centrada en el Partido Nacional, Lacalle opinó que sería “disneylandia” pensar que es una coalición encolumnada detrás de él y aseguró que intenta generar “un espacio lo más abierto posible, que no genere asfixia”. “Los partidos de la coalición tienen matices, competimos entre nosotros”, recordó.

También con respecto a Manini Ríos, Lacalle aseguró que se reunió personalmente con él para asegurar el voto de su partido en la reforma de la seguridad social y da por descontado que así será.

“Hay que tratar de entender, aunque no significa compartir, entiendo pero no comparto”, dijo respecto de la propuesta cabildante de esperar a votar la Rendición de Cuentas para aprobar la reforma de la seguridad social. “Además, le doy una trascendencia muy importante a la palabra empeñada, y la palabra empeñada de los socios de la coalición es votar la reforma de la seguridad social”.

Asimismo, sobre la coalición, dijo que espera que se mantengan todos los ministros en sus puestos y que el único recambio a la vista es el de Daniel Salinas, que deja el Ministerio de Salud Pública. De todas formas, adelantó que sabe que más cerca de la fecha de las elecciones internas varios ministros y dirigentes del gobierno deberán renunciar a sus puestos para iniciar la campaña electoral.