Las lluvias en abundancia que se dieron el viernes pasado en la zona metropolitana no fueron suficientes para paliar el déficit hídrico que atraviesa el país. Por eso, el gobierno mira con atención qué medidas tomar de cara a los próximos días, que serán cruciales si no hay nuevas precipitaciones.

El subsecretario de Ambiente, Gerardo Amarilla, dijo a la diaria que si bien ayudó la lluvia del fin de semana “igual no es suficiente”. “Hay que mantener las medidas y esperemos que en los próximos días, además de las lluvias que están previstas para este fin de semana, también tengamos el funcionamiento correcto de este nuevo embalse en Paso Belastiquí, que nos ayuda”, indicó.

Mientras tanto, Amarilla sostuvo que habría que esperar “para ver qué medidas tomar” en caso de que la situación siga igual. “No me adelanto. En la mesa de trabajo hay muchas hipótesis [de qué eventuales medidas tomar] y estamos trabajando, pero es como adelantarse a las mismas antes de que ocurran los hechos”, sostuvo. Aseguró que “por ahora” hay reservas de agua dulce y que aguardan a que las lluvias de los próximos días puedan “fortalecer” las mismas.

“Con la baja de temperaturas el consumo de agua también se reduce, ahí hay un combo de situaciones que van ayudando a mantener el estado de cosas esperando más lluvia”, agregó.

A futuro, si la cosa continúa de la misma manera, tal como han dicho las autoridades, se piensa en la importación de agua para consumo y en la búsqueda de algunas otras reservas de agua para fortalecer las cuencas. “En principio de la semana que viene seguramente tengamos más definiciones al respecto para atender la situación”, señaló.

Por su parte, Natalí Bentancor, directora de Servicios Meteorológicos del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), dijo a la diaria que las precipitaciones que se registraron el viernes pasado estuvieron, por sobre las zonas de las cuencas, en el entorno de los 45 y 50 milímetros. “Toda precipitación colabora y contribuye a que comience a minimizarse el impacto del déficit de lluvias”, indicó, y agregó que “esto es un proceso que va a ser lento y que no sirve tanto que sean eventos aislados de precipitaciones, sino que tienen que ser un poco más continuas”.

Para Bentancor, “no sirve de nada” que, por ejemplo, llueva y esperar una semana y media más “para tener otro evento de lluvia”: “Tienen que ser un poco más constantes y durante el mes alcancen la media climatológica para la época del año”.

Según la profesional, tiene que ser algo que sea “parejo o continuo” para que comience a regularizarse de acuerdo a las estadísticas climatológicas. “Tiene que ser durante el mes y varios meses consecutivos para que se comience a revertir este déficit en las lluvias”, consideró.

Para el fin de semana se prevén lluvias para el área metropolitana, pero se espera que no sean más de 20 milímetros, por lo tanto, la situación seguiría prácticamente incambiada.

A la espera

El directorio de OSE, que monitorea día a día la situación, suele reunirse los miércoles pasada la mañana, pero esta vez la sesión se suspendió por razones personales de uno de sus integrantes. Edgardo Ortuño, director del ente por la oposición, dijo a la diaria que las lluvias permitieron una recuperación parcial pero “poco significativa” que no modifica la situación.

Se estima que en Paso Severino se recuperaron unos 24 centímetros de diez metros de pérdida que tiene el embalse. “La situación en general no se modificó y se mantiene la perspectiva de un escenario complicado de no ocurrir lluvias significativas en los próximos 20 días, que es la reserva de agua dulce en Paso Severino”, advirtió.

En ese marco, también expresó que bajó el consumo de agua por día a unos 540.000 metros cúbicos aproximadamente -casi unos 40.000 metros cúbicos menos que a principios de mayo-. La mayoría del caudal fue tomado desde el Río de la Plata. Las razones, según entiende Ortuño, son cuestiones climáticas y el respaldo de la ciudadanía a las medidas de restricción del consumo y la disminución del suministro por el manejo de presiones y reservas que viene realizando OSE.

De todos modos, se viene bombeando “de aguas abajo” del Río de la Plata. “Si no hay nuevas lluvias, no hay que descartar un escenario no deseado de un abastecimiento basado en el agua del Río de la Plata, que sería un nuevo escenario con nuevos valores de cloruros y sodio”, por tanto, tendrá mayor salinidad, consideró, e insistió con tener un plan de contingencia.

¿Qué sucede en las cuencas?

Inumet dio cuenta de la situación de las cuencas del río Santa Lucía y del Río de la Plata. Según el informe difundido ayer, apuntan que “continúan las anomalías negativas, que se iniciaron al menos en el mes de febrero del año pasado”: “El último mes con anomalías positivas fue el pasado enero de 2022”, subrayaron.

Con base en el estudio en las primeras tres semanas del mes, el organismo destacó que, a pesar de las lluvias ocurridas, “continúa el déficit hídrico en el centro-sur del país, y que ha mejorado la situación en la frontera noreste”.

Para los próximos días, en ambas cuencas, según Inumet, se espera un promedio de precipitaciones acumulado menor a 10 milímetros, “con valores puntualmente superiores en distintas localidades”. Tras las lluvias, y en relación al pronóstico que tienen hasta el 13 de junio, se prevé “al menos dos eventos de precipitaciones”: “El primero entre el 6 y 9 de junio para el que se estiman acumulados entre 10-20 mm; mientras que el segundo evento se podría desarrollar posterior al 10 de junio”.