Una vez más, Uruguay emitió una declaración separado de los demás países del Mercosur

Tradicionalmente, las cumbres de presidentes del Mercosur terminan con la emisión de un comunicado firmado por todos los gobiernos. Sin embargo, nuevamente Uruguay eligió separarse del bloque y firmar un comunicado en solitario, marcando algunas diferencias mínimas con sus socios.

Como era de esperarse, la diferencia principal está en que Uruguay insiste en la modernización del bloque, mientras que los demás países matizan este objetivo. El gobierno de Lacalle Pou afirma que es necesario incluir “la conformación de la zona de libre comercio, y la revisión de los instrumentos de inserción internacional con un enfoque pragmático y flexible”, mientras que los demás gobiernos entienden que la modernización pasa por incluir “el fortalecimiento de la agenda interna para una mayor integración de sus economías, así como la estrategia de inserción internacional, sobre una base consensuada y solidaria para encarar los desafíos de un escenario mundial en transformación”.

Uruguay insistió en “la necesidad de trabajar para conformar la zona de libre comercio del bloque, donde aún se observan distintos tipos de dificultades para el comercio y la integración”.

Los demás países del Mercosur marcaron la necesidad de “trabajar para fortalecer la cohesión interna del bloque, donde aún se observan distintos tipos de dificultades para el comercio y la integración, profundizar su inserción comercial internacional y articular mecanismos que favorezcan la formación de cadenas de valor regional”.

La división económico-comercial también trajo algunas diferencias entre los comunicados. Uruguay hizo dos distinciones que los demás países no acompañaron. Por un lado, marcó un punto sobre el arancel externo común: “En la actualidad el Mercosur no ha logrado constituir un Arancel Externo Común, teniendo en cuenta que los Estados Partes aplican distintos aranceles nacionales en su comercio extrazona. Esta situación, entre otras, deja en evidencia la necesidad de seguir trabajando en favor de constituir una zona de libre comercio”.

Además, también puntualizó sobre las restricciones no arancelarias y subrayó su “efecto negativo”. Destacó que la eliminación de este tipo de restricciones contribuye a la consolidación y el perfeccionamiento de la zona de libre comercio. Al respecto, recordó la presentación por parte de Uruguay de un proyecto de Decisión que busca la eliminación de la totalidad de las restricciones de todos los socios en un plazo de un año.

Hubo algunas otras diferencias en la redacción sobre el funcionamiento institucional, en el que tanto Uruguay como los demás países destacaron los concursos que se hicieron a nivel de la secretaría del Mercosur.

El otro bloque que presentó más diferencias es el relacionado a las negociaciones externas. Mientras que Uruguay pidió priorizar “aquellos escenarios de negociación que ofrezcan posibilidades para los países del Mercosur”, los demás integrantes del bloque optaron por “profundizar su inserción en las cadenas interregionales, atraer inversiones, aumentar sus exportaciones y generar empleo de calidad”.

En esta división, Uruguay fue el único que “lamentó, sin embargo, que el Mercosur haya suspendido tres reuniones de trabajo con la Unión Europea por la imposibilidad de elaborar una contrapropuesta al bloque europeo”.

Además, también fue el único en resaltar su disposición “para trabajar de forma constructiva y flexible, tanto a la interna del Mercosur como con la contraparte, para alcanzar la firma del Acuerdo a la mayor brevedad” .

Finalmente, Uruguay fue el único que hizo mención “a los trabajos técnicos de intercambio de estadísticas con Vietnam y a la consideración de alternativas para avanzar con la contraparte”.